Mercados compulsivos: El dólar sube en el mundo y en Argentina baja

Economía
La oferta compulsiva de bonos en dólares, contratos de futuros cambiarios y hasta billetes le permitió al Banco Central (BCRA) hacer caja por US$ 340 millones, a la vez que generó las condiciones para que los precios libres del dólar, por razones forzadas, caigan de 1,7 a 1,9% ayer. Aunque no le sirvió para reforzar las reservas (porque en su mayoría son dólares que ya estaban computados allí), el BCRA reforzó su disponibilidad y poder de fuego, en momentos en que la sostenida demanda de dólares y la reticencia de los exportadores a liquidar había dejado su posición neta de divisas apenas 20% arriba del nivel que tenía a fines de enero, cuando debió convalidar la devaluación del peso.

En baja. La divisa norteamericana sigue con días inestables en el país.

 

Los analistas creen que el "parche" aplicado sólo modificará temporalmente la dinámica del mercado. Incluso advierten que esa temporalidad será "más breve" que la observada la última vez que aplicó una medida similar (febrero), porque su impacto hoy es más limitado y la reacción oficial llega no sólo cuando la oferta de dólares tiende a debilitarse (al haber finalizado la temporada alta de liquidaciones sojeras), sino cuando el dólar en el mundo da señales muy concretas de haber dejado atrás su etapa de debilidad. En este sentido se produjo una paradoja: el peso se valorizó frente al dólar, en una jornada en la que el resto de las monedas del mundo se depreciaron contra esa divisa.

La referencia al panorama mundial alude a la salida devaluacionista que el Banco Central Europeo (BCE) intenta para dejar atrás la crisis en esa región. Ayer bajó de 0,15 a 0,05% anual la tasa de referencia para la zona del euro, mantuvo en -0,20% la penalidad por depósitos en sus arcas (para desalentar a los bancos a acopiar dinero) y anunció que en dos semanas comenzará a prestarles unos 400.000 millones de euros, que podrán devolver en hasta cuatro años. Minutos después, el euro cayó frente al dólar debajo de US$ 1,30, moneda que tomó vuelo contra el resto de las divisas del mundo, a excepción del peso argentino.

Este robustecimiento de la moneda en que cotizan las commodities colaboró para que derrape otro 1,5% el precio de la soja en Chicago (US$ 391 la tonelada), que ya cae 17% en el año.

"Si creen que con esto dan un golpe de gracia a las expectativas devaluacionistas, se equivocan otra vez", dijo un operador. Más allá de las ventas forzadas, el ajuste en los precios de los activos dolarizados y algunas acciones, aunque bastó para cortar la racha de alzas de la Bolsa, fue menor al esperado; en parte, porque algunos inversores vieron la baja como una "oportunidad" de compra. Además, en apenas cuatro días de septiembre, ahorristas e inversores compraron en el circuito legal tantos dólares como en todo el mes de marzo y más que los demandados en todo abril o mayo (ver cifras).

Por lo pronto, ayer las ventas por la norma que obliga a la banca a reducir en un tercio (del 30 al 20%) sus tenencias en divisas hicieron caer 1,9% el dólar-fuga. A su vez, éste tiró abajo casi 2% al paralelo (de 14,26 a 14,02 pesos), lo que ayudó a reducir del 70 al 67% la brecha abierta con el oficial. Pero, pese a que el BCRA compró a exportadores US$ 30 millones, no pudo parar la sangría de reservas, que ya llega a US$ 1250 millones en 30 días.

 

Fuente: La Nación
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