Importante crecimiento del consumo en dólares con tarjeta por temor a una devaluación

El consumo en dólares con tarjetas de crédito trepó en septiembre 53% y, en octubre, 55%. Además hay más viajeros y compras adelantadas por una posible devaluación del nuevo Gobierno a partir del 10 de diciembre.

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Miedo a la devaluación: creció el consumo en dólares con tarjeta.

Gustavo tiene previsto viajar a Miami en febrero con su familia. No sólo pagó ya los pasajes y el hotel, sino que el último mes aprovechó para comprar, por Internet y con su tarjeta de crédito local, gift cards (tarjetas regalo) de todos los negocios en los que suele consumir: Gap para los chicos; Victoria Secret, para sus hijas y su mujer, Amazon y hasta del restaurante Cheescake Factory.

El ajuste cambiario es, para muchos argentinos, inminente. Al menos, la mayoría de los tenedores de tarjetas de crédito parecieran haberlo descontado: en octubre, los consumos en moneda extranjera se aceleraron y avanzaron en torno del 55% con respecto a igual mes del año anterior.

Así se desprende de un relevamiento entre varios bancos que tienen fuerte presencia en el negocio de plásticos. En las entidades confiaron que, desde septiembre, las compras de argentinos en dólares vienen creciendo a un ritmo superior incluso al de los consumos en pesos.

"En septiembre versus los tres meses anteriores, el consumo en dólares con tarjeta subió entre nuestros clientes un 47%; en el mismo período, el consumo en pesos había subido 11,35%", ilustraron desde un banco internacional.

"Nosotros pasamos de transferir para el pago de tarjetas US$ 4 millones semanales en septiembre a US$ 6 millones en octubre", detallaron desde un banco nacional. "El año pasado, para la misma época estábamos en poco más de US$ 3 millones semanales, tanto en septiembre como en octubre", explicaron.

El mayor gasto en moneda extranjera refleja, por un lado, el crecimiento que hubo en la cantidad de argentinos viajando al exterior. Según el Indec, en septiembre pasado, salieron del país 525.000 argentinos, un 32,9% más que igual mes del año anterior. Pero, por el otro, los resúmenes de tarjetas también incorporan el comportamiento de muchos argentinos que anticipan consumos para fijarse el tipo de cambio a futuro y, así, en lo posible, ganarle a una devaluación del peso.

Para las compras en moneda extranjera, el tipo de cambio hoy se ubica en torno de los 13 pesos, ya que al dólar oficial de $ 9,63 hay que sumarle la retención del 35% que hace la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) en concepto de anticipo de Ganancias.

Aunque más caro que el oficial, el "dólar tarjeta" todavía está muy lejos del cambio que se consigue en el mercado paralelo, que ayer se operaba a 15,30 pesos. Y, para algunos trabajadores en relación de dependencia, la calculadora ofrece un número todavía más atractivo, ya que existen varias empresas que benefician a sus empleados con la devolución mensual del impuesto a las ganancias, con lo cual en esos casos el valor del dólar se ubica muy cerca del que publican los bancos en sus pizarras.

Fin de ciclo

En una entidad de primera línea estimaron que cerca del 20% de las transacciones en moneda extranjera son de comercio electrónico. En su caso, los consumos en dólares habían crecido al 53% interanual en septiembre pasado y se aceleraron hasta avanzar a un ritmo del 55% interanual en octubre.

"Hay una sensación de fin de ciclo, y ante la duda, muchos anticipan compras", dice el ejecutivo de una emisora de tarjetas de crédito, que pidió no ser identificado. "Probablemente, sea una de las devaluaciones más anunciadas de los últimos tiempos. Es insostenible el dólar a 9 pesos y muchos lo saben", agregó.

De acuerdo con datos del Banco Central (BCRA) a junio pasado (últimos disponibles), en el sistema financiero hay casi 32,4 millones de plásticos emitidos, y 20,5 millones de titulares de tarjetas de crédito. En los primeros seis meses del año, la cantidad de plásticos aumentó en un 4% (de 31,1 millones en diciembre pasado), mientras que el número de titulares bajó prácticamente en un 2%, lo que significa que es mayor la proporción de individuos que tiene más de una tarjeta a su nombre.

Fuente: La Nación