Los cambios monetarios tras doce años de inflación

Economía
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Se realizó un relevamiento de la evolución de los precios desde mayo de 2003, cuando Néstor Kirchner asumió la presidencia. Los alimentos y bebidas son los que más escalaron en las góndolas. Incluso, algunos productos subieron más de 1.000% en los súper.




 





La fuerte suba de precios no pasó desapercibida para los argentinos en los últimos años. Los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) dejaron de ser confiables tras su intervención en 2007, y tanto mediciones privadas como públicas buscaron ocupar su lugar a la hora de informar. Pero más allá de la cifra de inflación que se considere a la hora de mirar la evolución de los precios, un factor no deja mentir: el bolsillo.

La escalada de precios en los últimos 12 años quedó registrada en las páginas de los diarios nacionales de la Argentina, que publican las promociones semanales que ofrecen las principales cadenas de supermercados. Y el resultado, según un relevamiento de 15 productos, dejó en evidencia subas mayores al 1.000% en algunos alimentos y bebidas. Lejos de una inflación de dos dígitos, los diarios de la época subrayaban el cambio de Gobierno y las nuevas figuras del gabinete, como así también las relaciones con el FMI tras la crisis de 2001.

A un día de que Néstor Kirchner asumiera la presidencia el 25 de mayo de 2003, el kilo de asado de novillo costaba $3,99 en la cadena Coto en la Ciudad de Buenos Aires. Hoy el kilo del corte de carne cuesta $76,90 en las góndolas del mismo supermercado, y muestra un aumento del 1.827% desde mayo de 2013 hasta la actualidad.

Llenar el changuito del súper hoy es todo un desafío, y los $100 cubren actualmente pocos productos. Con el billete de mayor denominación de la Argentina se compran en 2015 cuatro paquetes de 500 gramos de yerba La Tranquera, un producto que cuesta $22,25 y entra en el programa de Precios Cuidados. Hace 12 años, ese mismo producto salía $0,99.


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Las bebidas también sufrieron un fuerte aumento desde 2003 hasta hoy. Una botella de agua Villavicencio aumentó un 1.032%, pasando de $0,95 a $10,75 el litro y medio. En los supermercados Disco, cada botella de Coca-Cola de 2,25 litros costaba $2,49. En las góndolas de la misma cadena en la ciudad de Buenos Aires, el producto aumentó un 1.103% y hoy sale $29,95.

El pan Fargo Doble integral es uno de los productos relevados que más aumento sufrieron. El paquete de 530 gramos costaba $2,45, y 12 años más tarde se encuentra en Disco por $49,90. La presentación actual tiene 10 gramos más que en 2003. En el mismo supermercado, el café molido Cinco Hispanos saltó de $1,99 a $28,60, una suba de 1.337% para el envase de 250 gramos.
Más allá de alimentos y bebidas, los productos de limpieza tampoco pudieron esquivar la inflación.

El mismo envase de suavizante para ropa Vivere subió 783% en este período, pues pasó de $2,49 a $21,99 en la venta al público por unidad en Coto. El precio del desodorante Rexona también sufrió una suba de tres dígitos. El envase de 131 gramos costaba $3,75 en mayo de 2003, mientras que hoy la misma presentación saldría $38,93 pesos, y la suba sería de 938%. Sin embargo, en el supermercado se encuentran envases de 105 gramos, que cuestan $31,21.

El supermercado Jumbo comercializaba el kilo de filet de merluza a $5,75 en sus sucursales. Hoy sale $75,99, lo que deja en evidencia una suba mayor al 1.200%. Las distorsiones de precios son más claras en la actualidad. Hace 12 años, Coto vendía este producto al mismo precio que Jumbo, y hoy lo ofrece a $69,90, una diferencia de $6.

Los 100 gramos de queso azul San Ignacio en Coto salían $1,49 en mayo de 2003. La presentación actual de 180 gramos sale $25 y entra en la lista de Precios Cuidados. Pero adaptando el precio actual a los 100 gramos, el producto subió 832%, porque costaría $13,88.

Graciela Bevacqua, ex directora del IPC del Indec, realizó una serie de suba de precios propia que reúne los datos oficiales hasta diciembre de 2006 -antes de la intervención- con datos propios.
"El IPC acumulado desde 2003 hasta agosto de este año es de 849%, y probablemente terminemos el año con un acumulado cercano a 934%", aseguró.


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Desde 2010, el IPC que calcula Bevacqua registró una inflación anual de dos dígitos para los alimentos y bebidas. El alza de ese primer año fue del 40% y es el nivel más alto de esa serie. El avance del año pasado fue el segundo más alto, superando el 35%. Con todo, el salario mínimo vital y móvil pasó de $270 en 2013 a $5.588 desde agosto de este año, lo que equivale a una suba de 1.970% en el periodo analizado.

El paquete surtido de galletitas Bagley que se vende en góndola salía $1,69 en 2003. Si hubiera mantenido la misma presentación de 500 gramos, el producto hoy valdría $24,36 y el aumento sería de 1.341% en el período analizado. Pero en estos 12 años el paquete se achicó y en la actualidad se vende por 400 gramos, a $19,49. El precio por kilo de las Bagley pasó de $3,38 a $48,72.

Los envases cambiaron para muchos productos. El yogur Ser descremado por 200 gramos costaba $1,99 hace 12 años. En la actualidad, la presentación de 240 gramos sale $14,39, pero si se lleva a 100 gramos, el costo comparable sería de $11,99.

A contramano, el aceite de girasol marca Cañuelas que se vende en las góndolas de Disco mantiene sus 900 mililitros. El aumento de 1.313% muestra tanto la inflación como la pérdida de poder de compra del billete de mayor denominación. En mayo de 2003, se podían comprar 43 botellas de este producto. Hoy sólo se pueden comprar tres.

 

Fuente: Infobae.-
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