
Tras la muerte de Emir Barboza, el niño de ocho años que fue alcanzado por una bala en medio de una balacera, el barrio de Rawson vive entre el dolor, la desconfianza y la espera de respuestas judiciales. La familia exige justicia.
El último sospechoso del caso Barboza se entregó junto a su abogada, quien afirmó que su cliente fue testigo del tiroteo y no participó del crimen. La Justicia realizará pericias para determinar responsabilidades.
Este viernes al mediodía, el último sospechoso que permanecía prófugo por el crimen de Emir Barboza, el niño de 8 años asesinado a balazos en el barrio Valle Grande de Rawson, se entregó ante la Justicia. Con su presentación, ya son ocho los detenidos en la causa que conmocionó a San Juan.
El hombre, cuya identidad se mantiene en reserva por razones de investigación, se presentó en un punto neutral, acompañado por su defensora, la doctora María Filomena Noriega, para evitar incidentes con familiares de la víctima que aguardaban en Tribunales.
En diálogo con la prensa, Noriega explicó que su defendido decidió entregarse por miedo a represalias, ya que “recibió amenazas de muerte por parte de allegados a la familia Barboza”. Según la abogada, el imputado “no participó del ataque”, sino que “presenció los hechos y huyó por los techos al escuchar los disparos”.
“Él manifestó que no estuvo en la gresca y que en ese momento estaba realizando una transacción, vendiendo zapatillas. Puede acreditarlo”, sostuvo la defensora, quien además adelantó que solicitarán la realización de un dermotest para confirmar que su cliente no disparó ningún arma.
Noriega insistió en que su representado “no tiene antecedentes penales” y que es “padre de menores”, por lo que pidió que se lo considere como testigo presencial y no como coautor del crimen.
Con la detención de este último sospechoso, la causa ya cuenta con ocho personas imputadas: Alan Juan Bazán, Dante Emanuel Carrizo, Gonzalo José David Santander, Hernán Ariel Carrizo, Cristian Daniel Guarardo, Jonathan Javier Carrizo y un menor de edad bajo la órbita de la jueza de Menores, Julia Camus.
El fiscal Sebastián Gómez, de la UFI Delitos Especiales, confirmó que todos los implicados estuvieron presentes durante el enfrentamiento ocurrido la noche del lunes 6 de octubre, cuando una balacera entre familias vecinas terminó con la vida del pequeño Emir.
Las pericias balísticas y de absorción atómica que se realizarán sobre los detenidos serán claves para establecer quién efectuó el disparo fatal. Mientras tanto, todos los involucrados enfrentan cargos por homicidio agravado por el uso de arma de fuego en calidad de coautores, aunque no se descarta que las responsabilidades cambien a medida que avance la investigación.
Tras la muerte de Emir Barboza, el niño de ocho años que fue alcanzado por una bala en medio de una balacera, el barrio de Rawson vive entre el dolor, la desconfianza y la espera de respuestas judiciales. La familia exige justicia.
La joven relató que el cantante estaba "muy violento" y "destrozando todo". El músico permanece detenido.
La funcionaria remarcó que, al tratarse de una donación, “la responsabilidad es de los padres y docentes que la recibieron”.
Rosa, la mamá del niño de siete años asesinado en el barrio Valle Grande, habló en exclusiva con Diario Móvil. Conmovida, pidió que los responsables “se hagan cargo” y que su hijo “pueda descansar en paz”.
El último sospechoso del caso Barboza se entregó junto a su abogada, quien afirmó que su cliente fue testigo del tiroteo y no participó del crimen. La Justicia realizará pericias para determinar responsabilidades.