El trabajo del árbitro en el rugby, contado por Zavalla y Vildozo, sus protagonistas

El referato en el rugby exige más que conocimiento técnico: demanda compromiso, templanza y pasión. Amelia Zavalla y Sofía Vildozo, referentes del arbitraje femenino sanjuanino, visitaron el aire de Bonus Rugby para contar cómo viven su labor dentro y fuera de la cancha, tras participar en una nueva edición del Nacional de Clubes Femenino.

Ambas cumplieron distintos roles en el certamen. Sofía fue nuevamente árbitra principal y destacó el aprendizaje constante que implica esta experiencia:

“Ir a un nacional es una experiencia hermosa. Aprendemos mucho cada vez que vamos. Desde 2018 participo como asistente y poco a poco fui dirigiendo juveniles. Esta vez me tocó en mayores, con un coucheo importante que nos ayuda a crecer”, comentó.

Por su parte, Amelia participó como coach de referees, guiando y acompañando a las nuevas generaciones: “Hace tres años voy como parte del staff de referees managers, y es muy lindo. Es distinto, uno siempre quiere estar dentro de la cancha, pero ahora toca apoyar desde afuera, animar a las chicas y ayudarlas a corregir sin frustrarse. Por eso es importante formarse en coaching”, explicó Zavalla.

Ambas coincidieron en que el arbitraje es un camino de constante autocrítica y mejora. “Esto es muy autodidacta. Va de la mano con la voluntad y las ganas que tengas de analizarte, verte en videos y aprender. A veces cuesta, pero siempre hay gente dispuesta a ayudarte”, contó Vildozo.

Amelia profundizó sobre la vocación y el sentido de pertenencia que implica el referato: “Es un compromiso desde el lugar que elijas estar. Uno toma esa responsabilidad y no puede soltarla, porque te gusta y porque te necesitan. Es un rol que se asume con pasión desde el primer día”.

Finalmente, Zavalla destacó la poca visibilidad que muchas veces tiene su tarea: “Son pocas las veces que alguien te dice que dirigiste bien. Cuando nadie te reclama nada, sabés que hiciste un buen trabajo. Los reconocimientos públicos no son frecuentes, pero el compromiso es el mismo siempre”.

Con historias diferentes, pero una misma pasión, Zavalla y Vildozo reflejan el crecimiento del arbitraje femenino y el lugar cada vez más fuerte que las mujeres ocupan en el rugby sanjuanino.

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