
Fue uno de los cinco apostadores que acertó el número de cartón en el sorteo N° 2383.
Personal policial de Rivadavia protagonizó una persecución y arresto tras presenciar una situación sospechosa en la intersección de las calles Meglioli y Tulum. Los agentes observaron un automóvil siguiendo de cerca a una moto ocupada por dos hombres, quienes tocaban insistentemente la bocina. Al notar la presencia policial, los ocupantes de la motocicleta comenzaron a esquivar vehículos, lo que llamó la atención de los agentes.
Los policías intentaron detener a los sospechosos para entrevistarlos, pero éstos optaron por huir en dirección este por la calle Cabo Al Cardinal. Tras una prolongada persecución, lograron la aprehensión del conductor de la moto, identificado como Echegaray, en la intersección de las calles Lucero y Aguilar, en el departamento Rawson.
Durante el procedimiento, se le incautó al aprehendido un teléfono celular con funda rosada, el cual estaba bloqueado con patrón y se encontraba entre sus pertenencias. Sin embargo, el acompañante del conductor logró escapar a pie por un descampado cercano.
Posteriormente, se estableció contacto con la presunta víctima, quien denunció haber sido agredida físicamente y que le sustrajeron su teléfono celular en la calle Meglioli. Ante esta denuncia, se procedió a intervenir bajo la carátula de robo por arrebato, quedando la motocicleta radiada de circulación.
Fue uno de los cinco apostadores que acertó el número de cartón en el sorteo N° 2383.
El joven de 30 años fue intervenido quirúrgicamente el lunes. Aunque estaría fuera de peligro, su cuadro sigue siendo crítico. El conductor del otro vehículo, Gilberto Gioja, dio positivo en alcoholemia.
Tras un nuevo encuentro en la Subsecretaría de Trabajo, el gremio confirmó que las empresas no presentaron una propuesta concreta y advirtió que, vencida la conciliación, irán a un paro por tiempo indeterminado.
Se trata de Juan José Gómez, quien circulaba en su moto y chocó contra un Peugeot 505. La Justicia investiga las causas del siniestro.
La banda cordobesa de cuarteto colmó el Estadio Aldo Cantoni. Sin embargo hubo numerosas quejas por la organización y por el operativo policial.