Del pésimo servicio telefónico y la inacción del Gobierno

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En esta nota, hablamos del pésimo servicio de telefonía, las denuncias al respecto, y el pobre accionar de funcionarios públicos. ¿Más? Sí, a continuación.



 

Para hablar “las cosas como son”, no queda otra más que afirmar que los servicios de telefonía móvil y fija son un verdadero desastre, una tremenda vergüenza y una descarada burla hacia los usuarios.

Pero, ¿cómo? ¡Si cada vez existen más beneficios! Claro, las compañías nos hacen creer que son beneficios cuando realmente no sirven de nada si el servicio básico es pésimo, y para colmo, esos “beneficios” traen por detrás una nueva “ventajeada”. Eso, sin contar que las tarifas son cada vez más altas, se “pinchan” los teléfonos fijos y se interceptan las líneas, entre otros tantos dramas. Para colmo, cada vez hay más antenas de telefonía móvil atestadas de aparatos que sin duda, aunque no esté comprobado, afectan sobremanera la salud de los ciudadanos.

Es así: pagamos para que nos estresen y enfermen. Lo más rico de todo, es que nuestro representante de la Dirección de Defensa al Consumidor, Elías Álvarez, confirmó en medios locales que “se está planteando un mapeo en las zonas donde hay más reclamos” (Aunque siempre todo queda en un plan o planteo…).

“Lamentablemente seguimos igual. Son las empresas más denunciadas. Con una marcada problemática de telefonía fija, con muchísimos usuarios de líneas afectadas, con cortes de varios días. Estamos en contacto con las empresas permanentemente y no tienen respuesta en cuanto a plazos y tiempos”, aseguró el funcionario, como de costumbre, aceptando la realidad pero sin accionar sobre ella.

Ahora, no le daremos todo el descrédito a Álvarez, ya que en realidad deberíamos preguntarnos entonces ¿Cuáles son las verdaderas competencias que tiene esta dirección en la provincia? ¿Es un mero receptor de denuncias?

El ex intendente de Rivadavia asume que “las multas no sirven de nada”. Bien, por supuesto, en el sentido de que no resuelve ningún problema real, además, dependería de la multa.

“Ayer escuché al Secretario Nacional de Comunicaciones, hacer mención sobre esto, para hacer un mapeo en aquellos lugares donde la falta de inversión tecnológica acarrea estos problemas. Esperemos que un plazo no muy largo, las autoridades nacionales hagan cumplir lo que corresponde para que estas empresas mejoren”, expresó Álvarez.

Es un deseo que tenemos todos. Pero no hace un año, ni dos. En cualquier momento esto se convertirá en una cuestión de décadas, después de años y años de ser estafados sin escrúpulos, y décadas escuchando a los gobernantes asegurar que están “planteando” o “buscando” una solución.

¡Basta! Los reclamos, se hacen constantemente. Estas empresas son demasiado poderosas económicamente y un solo usuario no puede con ella. Quien tiene que responder por nosotros es el Gobierno.

Bien lo dijo Álvares: “estas empresas cobran el servicio inexorablemente, sino el usuario corre riesgo de ser requerido por un club de abogados para que pague, pero el servicio deja mucho que dejar”.
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