Facebook: La red social por la identidad ¿Cuántos “me gusta” le darías?

Por Lucas Silrom

Resulta que desde el 12 de agosto del corriente año la red social más famosa del mundo, o sea, el "fazebuk", permite a sus usuarios paisanos cambiar en su descripción de sexualidad entre 54 opciones ( la mierda, nunca supe que fueran tantas!!!!!! ) somos el primer país latinoamericano en el que tales posibilidades están disponibles y vamos detrás de EE.UU, Reino Unido y España.

 

Hasta “La Cristina” aplaudió la iniciativa (nótese que no son la red social que en solo 10 años se convirtió, además de en una corporación económicamente poderosa,  en un poder casi en sí mismo por ser boludos, -jaja!-) lo cierto es que desde hoy cualquier usuario argentino al configurar su perfil podrá expresar de manera más adecuada su identidad dando clic a la opción personalizar.

En este proyecto participaron diversos representantes de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA), la Federación Argentina LGBT y otras agrupaciones que trabajaron en la adaptación de más de 50 definiciones de género disponibles. Asimismo, la red que se convirtió en la pantalla más famosa donde millones y millones de protagonistas transmiten en directo su vida cada día, todo el día, también ofrece la posibilidad de elegir el pronombre más adecuado para ser citados en la red social.

Y como todavía,  después de ser el primer país de Latinoamérica en reconocer a la comunidad homosexual su derecho de declarar su amor igual de legítimamente  que cualquier pareja straight quedan y a montones locas de armario,  todas estas personalizaciones también contemplan la posibilidad de controlar su visibilidad ante determinadas audiencias, y de esta forma los usuarios que opten por definir su género podrán compartirlo con sus amigos, familiares o de forma pública.

No sé si a usted señor lector le parecerá tanto pero en mi caso, (que se me dijo puedo escribir de lo que quiero) decidí escribir esta semana sobre esto porque me parece una noticia agradable, y pienso que debería haber más noticias agradables en los medios y no solo lo morboso o friki que nuestra realidad puede ser, lo que en la ausencia de noticias sobre las muchas cosas buenas que como raza estamos haciendo se sobredimensiona mas allá aún. Será que soy solo un iluso, pero es que noticias como ésta me hacen ver que no todo está perdido, la vida siempre se abre paso se me dijo alguna vez, y lo creo, esta iniciativa no solo pone a la vanguardia a una empresa que sabe bien que su negocio se basa en crear vanguardia o al menos estar en ella, es la posibilidad para muchos de ser más auténticos puesto que puede ser que muchos sientan que son al menos en el mundo virtual más parecidos a lo que soñaron sobre sí mismos.

Entonces es que Facebook no está haciendo más que mostrarnos lo revolucionario  que el invento de la Internet resulta para la raza, implicancias muchas que ni siquiera todavía podemos imaginar. La red social que tiene 1230 millones de usuarios alrededor del globo no hace más que cumplir su cometido, pese a que es cierto  también que a cambio de “ser” en el mundo virtual  a veces la personas ceden mucho de su derecho a la privacidad (lo que  seguro llegado el momento también habrá de regularse) porque veo casi físicamente la paragona de nuestra existencia en este juego, con nuestros alter egos valiéndonos de la última tecnología.

Es que así como en el universo existe lo que parece un infinito de caótico desorden sucede lo mismo en un universo virtual muy nuevo para ser regulado, también tanto en un lado como en el otro existe la semilla del orden y es que el triunfo de aquel mundo donde su abecedario empieza siempre o casi con una triple W sobre el mundo de la televisión, el papel y en general sobre todo el mundo pre revolución virtual, está dado justamente en lo que posibilita: el acceso a la información en ningún mundo fue más democrático, las bibliotecas nunca estuvieron tan cerca, las posibilidades tampoco.

Ahora ya no se nos dice lo que debemos hacer o a qué hora, no nos dicen que ver y ni siquiera que mostrar dado que a través de esta pantalla todos somos iguales: “protagonistas”, y es que  siempre me digo a mi mismo: “Mí mismo, no vinimos al mundo a saber de historia sino a contar la nuestra”. Eso supongo lo sienten muchos y está bien que así sea, ¿Pero cómo contar nuestra propia historia sin identificarnos con ella?

Hoy más que nunca hablamos nosotros y por ello el “me gusta” que le pongo a Facebook por esta iniciativa, un pequeño cambio que posibilita más identidad, es uno de nuestros primeros derechos y debemos trabajar sobre él.

Por eso me gusta, porque me hace ver un mundo más allá de este momento, en un momento más allá de este, cuando ya no importe tanto ni Facebook ni nuestra tan mentada identidad virtual, porque será un mundo al menos más cercano a encontrar su identidad real, que no son solo rótulos ni titulares, un mundo que entienda que somos más diversidad que homogeneidad y que el orden no es que todos seamos iguales, el orden está en ser “uno mismo” primero,  para construir luego un “juntos” aceptando  nuestras diferencias. Ser uno mismo no se puede sin ellas, reconocerlas es hacernos “uno” siendo “únicos” y a mí ser único “me gusta” más allá de 54 rótulos o definiciones.

¿Y vos cuantos deditos para arriba le das?