Se reflota el conflicto armado en Gaza

Israel atacó Gaza y evalúa más represalias. Es en respuesta por el asesinato de tres jóvenes. 

Bombardeos. Tras el asesinato de tres jóvenes israelíes, el Gobierno de ese país decidió retomar la violencia en la Franja de Gaza.

 

Fuente: La Nación

En un escenario de extrema tensión, Israel bombardeó ayer en Gaza decenas de posiciones militares del grupo islamista Hamas, al que acusa de ser el responsable del secuestro y posterior asesinato, en una aldea de Cisjordania, de tres adolescentes israelíes, cuyos cuerpos fueron hallados anteayer. El gabinete de seguridad de Israel, golpeado por profundas divisiones políticas, mantuvo ayer una prolongada reunión en la que se debatieron más medidas contra Hamas, entre ellas la extensión de las represalias militares, tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania, territorio palestino controlado por la organización moderada Al-Fatah.

"Consideramos a Hamas responsable del secuestro y asesinato -reiteró ayer el ministro de Defensa israelí, Moshe Yaalon-. Seguiremos persiguiendo a los asesinos de los adolescentes. No descansaremos hasta que les pongamos la mano encima." En las primeras horas de ayer, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) realizaron "ataques de precisión" contra 34 objetivos en la Franja de Gaza. Previamente, extremistas palestinos habían disparado desde Gaza por lo menos 18 cohetes contra territorio israelí desde la noche del domingo. Los blancos fueron instalaciones militares de Hamas y de la Jihad Islámica, que habían sido evacuadas ante la posibilidad de que hubiera ataques. El norte de la Franja de Gaza también fue atacado por la armada israelí, desde el mar.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, había prometido que Hamas pagaría por la muerte de los tres estudiantes de un seminario judío cuyos cuerpos fueron hallados bajo un montón de piedras cerca de la localidad cisjordana de Hebrón. El grupo islamista, que llama a la destrucción del Estado de Israel, no confirmó ni negó las acusaciones sobre su papel en la desaparición, el 12 de junio, de los estudiantes cuando hacían dedo cerca de un asentamiento judío. En la reunión del gabinete de seguridad, el ejército propuso "acciones calculadas y moderadas" contra los extremistas en Cisjordania en respuesta a las muertes de los adolescentes. Pero los ministros y militares no acordaron sobre el curso futuro de las acciones, ante la división de quienes exigen una respuesta más dura y aquellos que abogan por medidas mesuradas.

Entre los primeros, dentro de la heterogénea coalición de gobierno que encabeza Netanyahu, se encuentran el ministro de Finanzas, el ultranacionalista Naftali Bennett, y el canciller, Avigdor Lieberman. Los moderados están representados por el ministro de Economía, el centrista Yair Lapid, y la ministra de Justicia y jefa negociadora con los palestino, Tzipi Livni. Sin embargo, cualquier campaña sostenida podría debilitar al presidente palestino, Mahmoud Abbas, que cuenta con el respaldo de Occidente y que semanas atrás selló la reconciliación con Hamas, enfrentados desde junio de 2007, cuando los islamistas tomaron el control de Gaza.

Netanyahu, que ya había rechazado el regreso de Hamas al gabinete de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), volvió a reclamarle a Abbas que anule el acuerdo de reconciliación entre Al-Fatah y los islamistas.

Estados Unidos y Egipto, una potencia regional mediadora, instaron a las partes a la contención. Sin dar detalles, la vocera del Departamento de Estado, Marie Harf, dijo ayer que existen "muchos indicios" de la responsabilidad de Hamas, pero pidió "moderación" a israelíes y palestinos a la espera de que se aclare lo sucedido. Un diplomático árabe familiarizado con la mediación egipcia entre Israel y los palestinos advirtió que El Cairo, haciéndose eco de Washington, esperaba que el gobierno de Netanyahu se manejara cuidadosamente.

En este contexto, la ira y la impotencia dominaron ayer a parte de la sociedad israelí durante los funerales conjuntos de Eyal Yifrah, de 19 años; Gilad Shaer, de 16, y Naftali Frenkel, de 16, en la ciudad de Modiin. Los sectores israelíes extremistas, por su parte, pidieron venganza contra los palestinos. En Jerusalén, los manifestantes de derecha gritaban consignas como "muerte a los árabes" o "Mahoma está muerto".

La protesta generó un congestionamiento de tráfico en la ciudad y la policía tuvo que intervenir para controlar la situación. Desde el secuestro de los jóvenes, el ejército israelí mató a cinco palestinos durante su operación de búsqueda en Cisjordania y arrestó a 420 más, 305 de los cuales son miembros del Hamas, y registró más de 2200 edificios.