Policías sanjuaninos sumarán cámaras corporales para registrar procedimientos

La tecnología aplicada a la prevención del delito se consolidó como uno de los pilares de la política de seguridad del Gobierno de San Juan. A dos años del inicio de la gestión provincial, el secretario de Seguridad, Enrique Delgado, afirmó que el fortalecimiento del sistema de videovigilancia, el uso de herramientas móviles y la modernización del equipamiento policial fueron determinantes para mejorar la respuesta ante el delito y avanzar en una baja sostenida de los indicadores.

“La tecnología hoy es indispensable. Nos permite prevenir, actuar con mayor rapidez y también generar confianza en la gente”, señaló Delgado en una entrevista en Radio Sarmiento. En ese marco, destacó el despliegue del Centro de Operaciones Especiales Móvil (COE) en los barrios, que permite mostrar en tiempo real el funcionamiento de las cámaras, las recorridas policiales y el trabajo coordinado de las fuerzas. “Cuando el vecino ve cómo funciona el sistema, entiende que hay presencia y control”, explicó.

De cara a 2026, la Secretaría de Seguridad proyecta una nueva etapa de inversión tecnológica, sujeta a la disponibilidad presupuestaria. Según detalló el funcionario, el requerimiento incluye la compra de unas 300 cámaras adicionales para reforzar el sistema del CISEM, que durante la actual gestión pasó de cerca de 200 cámaras operativas a más de 530. A esto se suma el objetivo de dotar al personal policial de cámaras corporales y armas Taser. “La meta es que cada policía que esté en la calle tenga una Taser y una cámara. Hablamos de alrededor de 1.500 dispositivos de cada tipo”, precisó Delgado, y remarcó que estos elementos brindan garantías tanto para el ciudadano como para el efectivo policial.

Tras el foco en la tecnología, Delgado se refirió a los resultados obtenidos. De acuerdo a las estadísticas oficiales del área de Seguridad, San Juan logró reducir el delito un 10% en relación con 2024, ubicándose por debajo de la media nacional. No obstante, el secretario aclaró que la mejora “no alcanza”. “Los números son positivos, pero para quien sufre un delito, la estadística no consuela”, sostuvo.

El funcionario explicó que los delitos de mayor incidencia siguen siendo el hurto y el arrebato, por lo que el despliegue policial se ajusta permanentemente en función del mapa del delito y de los reclamos vecinales. En ese sentido, destacó la realización de conversatorios barriales con vecinos, uniones vecinales e intendentes, donde se escuchan demandas concretas y se reorganizan los recursos en territorio.

En cuanto al recurso humano, Delgado recordó que entre 2024 y 2025 se incorporaron más de 300 agentes a la Policía de San Juan y 118 efectivos al Servicio Penitenciario Provincial, fortaleciendo la presencia en la calle y el sistema penitenciario. Para 2026, adelantó que habrá menos de 100 nuevos ingresos, debido a la baja cantidad de retiros previstos, y aclaró que el número final será definido por el Ministerio de Economía, cuidando el equilibrio fiscal.

Finalmente, el secretario remarcó la importancia del trabajo articulado entre la Policía de San Juan, el Servicio Penitenciario y las fuerzas federales. “La coordinación y el intercambio de información nos permitieron avanzar en operativos conjuntos con buenos resultados. Ese es el camino para seguir mejorando la seguridad en la provincia”, concluyó.