El Gobierno instaló nuevas cámaras y amplió la presencia policial en Valle Grande

Tras los hechos de violencia ocurridos en Valle Grande que derivaron en la muerte del pequeño Emir Barboza, el Gobierno provincial dispuso un fuerte refuerzo en materia de seguridad en la zona. El secretario de Seguridad, Enrique Delgado, confirmó que se está desarrollando un operativo de saturación, con presencia simultánea de todas las divisiones de la Policía de San Juan, mientras se trabaja en la instalación de nuevas cámaras y el fortalecimiento de la comisaría local.

El funcionario explicó que esta intervención busca estabilizar la situación y restablecer la normalidad en el barrio, que en los últimos días fue escenario de tensión y temor entre los vecinos. Señaló que el operativo no será permanente, sino que se mantendrá “el tiempo necesario para que la comisaría tenga el control total del área”, lo que incluirá la incorporación de más móviles y efectivos policiales en el territorio.

Delgado también informó que el sistema de videovigilancia del CISEM fue reparado luego de que una de las cámaras del sector quedara fuera de servicio la noche del crimen por un corte de conectividad. “Ya está nuevamente operativa y se sumó otra cámara en una zona que no contaba con monitoreo”, detalló el secretario. Con esto, el Ministerio de Seguridad busca fortalecer la prevención y monitorear de manera continua el movimiento en los accesos al barrio.

En paralelo, el funcionario destacó que la actividad en el barrio se ha normalizado progresivamente. La escuela de Valle Grande retomó sus clases en todos los turnos y, según informó, tanto docentes como alumnos concurren con regularidad. “El barrio está en calma y la vida cotidiana se desarrolla con normalidad”, señaló.

Delgado explicó que Valle Grande es una de las zonas que requiere mayor densidad de presencia policial, al igual que otros sectores del Gran San Juan, como Chimbas, Capital, Rivadavia y Santa Lucía, donde la expansión urbana ha transformado antiguos sectores rurales en zonas suburbanas con alta población.

“Estamos ajustando el mapa delictual para responder a los cambios que tuvo San Juan en los últimos años”, señaló el secretario, al remarcar que la seguridad debe acompañar el crecimiento urbano de departamentos como Rawson y Pocito.