
El hallazgo ocurrió en el interior del barrio Huarpe durante las últimas horas y generó un fuerte operativo policial en la zona.
Roberto Carlos Peña fue encontrado sin vida el martes pasado en una propiedad rural. La autopsia reveló lesiones internas graves y ahora investigan si un caballo lo golpeó con violencia tras romper el cerco.
Una muerte inicialmente atribuida a causas naturales tomó otro rumbo en las últimas horas, luego de que la autopsia indicara signos de violencia interna. El martes 24 de junio, Roberto Carlos Peña, de 56 años, fue hallado sin vida en una finca del departamento 9 de Julio, donde se desempeñaba como casero. En un primer momento, el equipo de Criminalística no detectó indicios de delito: el cuerpo estaba en buen estado, sin signos externos visibles, ni faltantes de pertenencias. Sin embargo, los resultados del examen forense cambiaron el eje de la investigación.
El informe del médico legista reveló que Peña falleció por una hemorragia interna causada por la rotura del bazo y del corazón, lesiones compatibles con golpes severos similares a los observados en accidentes de tránsito. Ante este hallazgo, la fiscalía de Delitos Especiales, a cargo de Iván Grassi, activó nuevas líneas de investigación para establecer con mayor precisión lo ocurrido.
Una de las principales hipótesis apunta a un posible ataque por parte de un caballo de raza que se cría en el establecimiento. Según el testimonio del propietario de la finca, uno de los machos —el único que llevaba bozal y cuerda— logró salir de su corral después de que se detectara una falla en el boyero, el cerco eléctrico que separa a los animales. El ejemplar fue hallado posteriormente junto a las hembras, una situación que podría haber provocado una reacción agresiva por el instinto de apareamiento.
El cuerpo del casero fue encontrado en el límite del boyero, en un sector donde había numerosas huellas de caballos. Los investigadores creen que Peña, al notar el escape del animal, intentó intervenir para llevarlo de nuevo a su corral, y en ese momento pudo haber sido embestido.
Mientras tanto, el Ministerio Público avanza con una serie de estudios técnicos y pericias complementarias. Entre ellos, se realizarán análisis de anatomía patológica para observar con más detalle las lesiones, pruebas de ADN sobre las manos de la víctima, y el análisis de los registros de las cámaras de seguridad instaladas en la casilla, que si bien no registran el punto exacto del hecho, podrían aportar información clave sobre los momentos previos.
Además, se trabaja en la triangulación de la señal del teléfono celular de Peña para reconstruir sus últimos movimientos. Según el fiscal Grassi, el conjunto de estas medidas será determinante para confirmar o descartar la hipótesis del accidente animal.
El hallazgo ocurrió en el interior del barrio Huarpe durante las últimas horas y generó un fuerte operativo policial en la zona.
El malviviente fue al centro de salud y descubrieron que tenía pedido de captura por lo que la Policía intervino y lo detuvieron.
El organismo trabaja con un equipo técnico y social que recibe denuncias, verifica en terreno y revoca adjudicaciones cuando no se cumplen los requisitos. Varias de estas casas se sumarán al sorteo del 25 de septiembre.
Los delincuentes aprovecharon la falta de seguridad en el edificio para llevarse dinero y celulares. La Policía investiga con cámaras de la zona, pero aún no hay detenidos.
El hecho ocurrió el sábado por la noche en inmediaciones del Parque de Mayo, sobre calle Urquiza, donde la víctima se encontró con un hombre que se presentó como “Mati Domínguez”.