Piden justicia por el asesinato de Guillermo Romero

El exboxeador recibió un disparo que terminó con su vida en el año 2011. El principal acusado del crimen estuvo prófugo cuatro años y medio, pero esta semana se entregó en la Justicia. La familia de Romero pidió en Tribunales por el avance del caso.

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Guillermo Romero, el exboxeador muerto de un tiro en 2011.

El 6 de febrero de 2011, Guillermo Romero recibió un disparo en la puerta de su domicilio en el Barrio Colón, en Santa Lucía. No obstante el esfuerzo de los médicos, el hombre murió 14 días después por las heridas provocadas por la bala que ingresó por costado izquierdo del pecho y salió por el derecho de su cintura.

Desde el primer momento, la familia del exboxeador de apenas 36 años denunció que el crimen lo había organizado un vecino del mismo complejo habitacional de nombre Martín Camargo. Según Nélida Castro, esposa del fallecido, el homicidio tenía por motivación un ajuste de cuentas.

Es que los Romero habrían denunciado a Martín y Cristian Camargo, ambos hermanos, por la venta de drogas en el barrio. Según el testimonio de la familia de Romero, la información se habría filtrado en la Policía Federal y enterados del hecho, los Camargo habrían ajusticiado al denunciante en una suerte de venganza.

Tras permanecer cuatro años y medio prófugo de la mano de la Justicia, este martes Martín Camargo se presentó voluntariamente ante el 4º Juzgado de Instrucción para declarar por la causa que lo investiga.

En su primera declaración, Camargo habría negado haber sido el autor ni el instigador del crimen de Romero y justificó su decisión de no presentarse ante en la Justicia en que tenía miedo de hacerlo.

Además se deslizó otra hipótesis del crimen. Supuestamente Camargo habría querido tener una relación con la hija menor de Romero, que en ese momento tenía 15 años. Esto también lo negó el principal sospechoso del asesinato ante el juez Maximiliano Blejman.

"Pedimos justicia por la muerte de mi marido. También queremos que nos devuelvan la custodia policial que nos quitaron hace seis meses. Tenemos miedo porque Martín Camargo mandó a matar a mi marido, estuvo prófugo cuatro años y se manejó con total impunidad. Además, su hermano Cristian Camargo trajo el Paco a San Juan y ahora está detenido en el Penal de Chimbas", relató Nélida Castro.