La víctima fatal fue encontrada con varias señales de violencia
El costurero atacado por ladrones regresó a su casa tras ser operado: “Yo quería quedar internado por el frío”
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Gregorio vive en la extrema pobreza y pasará su recuperación en su precaria vivienda del barrio 12 de Julio.
El pasado 25 de abril, Gregorio Copacati fue brutalmente golpeado por delincuentes que lo atacaron para robarle en una parada de colectivo de su barrio. Sufrió una grave fractura en la pierna izquierda que demandó una cirugía en el Hospital de Urgencias de Córdoba. Le dieron de alta este viernes y regresó a su humilde hogar: "Yo quería quedar internado por el frío".
Gregorio tiene 65 años y se desempeña como costurero. Reside en una pequeña vivienda en medio de la extrema pobreza: sobrevive con aproximadamente 10 mil pesos por mes, de lo que puede juntar con su trabajo. Su caso cobró notoriedad pública tras el ataque que sufrió cuando se dirigía a la iglesia.
“Hoy me dieron el alta médica y ya estoy en mi casa. Estoy recostado porque me han dicho que no me mueva por las dudas. No me dejaron internado porque a todos los operados le dan de alta rápido. Yo quería quedar internado por el frío”, relató el hombre a ElDoce.tv.
El costurero manifestó a este medio que regresó a su hogar en un taxi pagado por el hospital y que le recetaron la medicación para que la compre en una farmacia. “No me dieron nada, ningún medicamento, por eso fue mi vecina a comprarlos”, dijo.
En plena recuperación, Gregorio pasará los próximos días en su humilde hogar: “Tendré que aguantar el frío como hice siempre, no puedo hacer nada”. El miércoles 12 de mayo deberá concurrir nuevamente al Urgencias para una revisión médica.
El pasado 25 de abril, Gregorio Copacati fue brutalmente golpeado por delincuentes que lo atacaron para robarle en una parada de colectivo de su barrio. Sufrió una grave fractura en la pierna izquierda que demandó una cirugía en el Hospital de Urgencias de Córdoba. Le dieron de alta este viernes y regresó a su humilde hogar: "Yo quería quedar internado por el frío".
Gregorio tiene 65 años y se desempeña como costurero. Reside en una pequeña vivienda en medio de la extrema pobreza: sobrevive con aproximadamente 10 mil pesos por mes, de lo que puede juntar con su trabajo. Su caso cobró notoriedad pública tras el ataque que sufrió cuando se dirigía a la iglesia.
“Hoy me dieron el alta médica y ya estoy en mi casa. Estoy recostado porque me han dicho que no me mueva por las dudas. No me dejaron internado porque a todos los operados le dan de alta rápido. Yo quería quedar internado por el frío”, relató el hombre a ElDoce.tv.
El costurero manifestó a este medio que regresó a su hogar en un taxi pagado por el hospital y que le recetaron la medicación para que la compre en una farmacia. “No me dieron nada, ningún medicamento, por eso fue mi vecina a comprarlos”, dijo.
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