
Tras la muerte de Emir Barboza, el niño de ocho años que fue alcanzado por una bala en medio de una balacera, el barrio de Rawson vive entre el dolor, la desconfianza y la espera de respuestas judiciales. La familia exige justicia.
«Es algo que desee todo este tiempo, que él esté en este momento, porque se lo debía todo», expresó Carolina, tras recibirse de profesora.
Llegó uno de los días más esperado para Carolina Romo, ya que logró recibirse de profesora de Biología a sus 29 años de edad en la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE). A pocos minutos de haber aprobado la última materia de su carrera, a modo de festejo, decidió soltar un globo con la leyenda «papi lo logré, me recibí. Te amo para siempre».
Esa dedicación tenía nombre y apellido: se trataba de Daniel Romo, quien lamentablemente falleció el sábado cuando se encontraba internado y no pudo estar presente en uno de los momentos de mayor felicidad de su hija. «Creí que me iba a esperar. Es algo que desee todo este tiempo que él esté en este momento porque se lo debía todo», dijo entre lágrimas Carolina a Diario Época.
Luego, contó que de la partida de su padre se enteró el sábado por la tarde cuando se encontraba estudiando y recibió el llamado de un médico que le comunicó el fallecimiento de quien sirvió al Ejército Argentino durante 35 años. «Más allá del resultado lo que más quería era cumplirle la promesa. Cada vez que rendía algún examen final él (por su papá) estaba más ansioso que yo, y había algunas veces no me quería presentar, pero siempre me alentaba para que rinda», recordó.
«Mi papá era mi amigo, confidente, era todo para mí. Y se me fue ante de lo previsto, me hubiese encantado que esté en este momento. Ahora sigo con la fortaleza, aunque tengo los momentos que me largo a llorar porque lo extraño», agregó Romo, quien, además, reveló que cuando su padre estaba internado, ella iba escribiendo un diario en el que contaba todo lo que trascurrían mientras esperabas su recuperación. «De hecho lo voy a seguir escribiendo porque extraño hablar con él», aseguró.
Posteriormente, dijo que llegó a Corrientes desde Mburucuyá para poder estudiar profesorado de Biología, y que durante la cursada también tuvo que trabajar para solventar los gastos que le demandaba la carrera. «Este año dediqué exclusivamente mis estudios y pudo sacar las seis materias que me quedaban», contó.
Para finalizar, Carolina dijo que su próximo objetivo es la de trabajar como profesora para así poder ayudar a su madre y cumplir los sueños que su papá tenía. Además, sostuvo que aspira a terminar la licenciatura en Biología.
Tras la muerte de Emir Barboza, el niño de ocho años que fue alcanzado por una bala en medio de una balacera, el barrio de Rawson vive entre el dolor, la desconfianza y la espera de respuestas judiciales. La familia exige justicia.
La joven relató que el cantante estaba "muy violento" y "destrozando todo". El músico permanece detenido.
La funcionaria remarcó que, al tratarse de una donación, “la responsabilidad es de los padres y docentes que la recibieron”.
Rosa, la mamá del niño de siete años asesinado en el barrio Valle Grande, habló en exclusiva con Diario Móvil. Conmovida, pidió que los responsables “se hagan cargo” y que su hijo “pueda descansar en paz”.
El último sospechoso del caso Barboza se entregó junto a su abogada, quien afirmó que su cliente fue testigo del tiroteo y no participó del crimen. La Justicia realizará pericias para determinar responsabilidades.