
El delincuente terminó atados de pies y manos, llorando y suplicando el parate del vecino. "No robo más", le dijo entre lágrimas. IMÁGENES SENSIBLES.
El vehículo fue baleado desde una moto y uno de los heridos se encuentra internado en grave estado.
Tres personas resultaron heridas, una de ellas de gravedad, tras ser atacado vehículo pintado como taxi en el que circulaban en la ciudad de Rosario por un motociclista vestido como delivery.
Según informó La Capital, el hecho ocurrió minutos después de las 19 del domingo cuando el vehículo tipo taxi -que no tenía letrero superior ni radiotaxi y se especula con que podría estar trabajando como remis ilegal o con una aplicación- circulaba por Corrientes e Ituzaingó.
En un momento dado, un motociclista vestido como delivery se puso a la par y abrió fuego contra los pasajeros, según contaron testigos, mientras que se informó que las balas ingresaron por la ventanilla trasera y por la luneta posterior.
Como consecuencia del ataque los tres pasajeros resultaron heridos, un hombre de 26 años y una mujer de 18 fueron trasladados por una ambulancia del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies) al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), él con heridas graves y ella con heridas de armas de fuego en las piernas, sin riesgo de vida.
En tanto, otro hombre fue atendido en el Hospital Provincial, aparentemente también fuera de peligro.
El delincuente terminó atados de pies y manos, llorando y suplicando el parate del vecino. "No robo más", le dijo entre lágrimas. IMÁGENES SENSIBLES.
El documento de la UFI Delitos Especiales detalla que el pequeño Emir Barboza ingresó sin vida al Hospital Marcial Quiroga con un trauma abierto de tórax. La Justicia continúa investigando el origen del disparo.
La Policía de San Juan informó que el menor murió tras ser alcanzado por un disparo en medio de un tiroteo entre grupos rivales en el barrio Valle Grande. Hay siete detenidos, entre ellos un menor, y dos armas secuestradas. La Justicia investiga un posible homicidio agravado.
La víctima estaba desaparecida desde este domingo.
El proteccionista Luciano Castro denunció que la familia del presunto agresor abandonó siete perros en el barrio Valle Grande tras el crimen del pequeño Emir. La ONG Mundo Patitas tomó el caso y pide ayuda urgente para darles refugio.