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La Justicia de San Juan investiga un presunto fraude millonario que tiene como víctima a una alta funcionaria judicial, la fiscal de impugnación Silvina Gerarduzzi

La Justicia de San Juan investiga un presunto fraude millonario que tiene como víctima a una alta funcionaria judicial, la fiscal de impugnación Silvina Gerarduzzi, y como principales sospechosos a su exempleada doméstica y al núcleo familiar de esta. Se los acusa de haber utilizado una tarjeta de crédito Visa que, según la denuncia, la fiscal nunca llegó a recibir.
El caso salió a la luz el 15 de septiembre de 2025, mientras Gerarduzzi se encontraba de viaje en España. Ese día comenzó a recibir múltiples alertas por consumos realizados con una tarjeta Visa que terminaba en 0915, un plástico que aseguró no haber activado ni visto jamás.
Al revisar los movimientos, se detectaron transacciones efectuadas entre el 8 y el 10 de septiembre, con compras por $160.485, $106.999, $97.295, $53.495 y $394.465, además de un intento fallido de pago por $622.360,23 a través de Mercado Pago, asociado a un usuario identificado como Brian Jesús Retamoso.
Durante una comunicación con Visa, la funcionaria fue consultada por si conocía a personas de apellido Retamoso, lo que la llevó a relacionar la situación con su exempleada Sandra Mónica Balmaceda, quien trabajó en su casa desde 2018 hasta marzo de 2025. Balmaceda convivía con su pareja, Juan Domingo Retamoso, y sus hijos Antonela Abigail y Brian Jesús Retamoso. Ese dato resultó clave para orientar la investigación.
La fiscal también recordó que en agosto había solicitado la baja de todas sus tarjetas, aunque el trámite no se completó. Luego descubrió por qué nunca recibió la tarjeta terminada en 0915: el guardia de seguridad del barrio se la entregó directamente a Balmaceda, quien presuntamente ocultó la llegada del plástico.
El 16 de septiembre, tras nuevas alertas por consumos por $320.230 en Mercado Pago, se amplió la denuncia. A pedido del Ministerio Público Fiscal, la plataforma confirmó que la tarjeta había sido asociada a las cuentas de Juan Domingo Retamoso y Antonela Abigail Retamoso.
La investigación preliminar determinó que Antonela Retamoso habría generado la mayor parte del perjuicio, con consumos y transferencias por $2.126.610, mientras que Juan Domingo Retamoso habría realizado gastos por $1.390.870. Sumando los montos aprobados y los intentos fallidos, el fraude estimado asciende a casi $6,6 millones. También se verificó un intento de transferencia de más de $600.000 por parte de Brian Jesús Retamoso, operación que fue bloqueada por el sistema.
Los informes del Banco San Juan, los reportes de Mercado Pago, el análisis de movimientos bancarios y la documentación aportada por la víctima permitieron reconstruir la maniobra. Con esas pruebas, la fiscalía ordenó allanamientos, la incautación de dispositivos electrónicos y la formalización de la imputación contra los sospechosos.
El fiscal Pablo Martín y su ayudante Federico Pereyra imputaron a Juan Domingo y Antonela Abigail Retamoso por defraudación por uso indebido de tarjeta en calidad de autores. A Brian Jesús Retamoso se le imputó el mismo delito, pero en grado de tentativa. En tanto, Sandra Mónica Balmaceda fue acusada como partícipe necesaria.
El juez Javier Figuerola aceptó las imputaciones y otorgó un plazo de 10 meses para la investigación penal preparatoria. Además, impuso a los acusados la obligación de someterse al proceso y la prohibición de contacto o acercamiento con la presunta víctima.


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