M4tó a la hija de su pareja: Pasará 17 años en el Penal de Chimbas

Leonardo “El Bruja” Tello, el hombre acusado de matar de un disparo a su hijastra Milagros Rivero Gutiérrez, de 12 años, fue condenado este viernes a 17 años de prisión efectiva. El hecho ocurrió la madrugada del 25 de diciembre de 2024 en Santa Lucía y generó una gran conmoción en la comunidad. Tello, de 32 años, llegó a la audiencia bajo prisión preventiva, medida que vencía el próximo 27 de diciembre, pero que quedó sin efecto tras la sentencia.

El acusado había sido imputado por homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego, una calificación sostenida desde la audiencia de formalización por el fiscal Francisco Micheltorena. Allí se estableció un año de IPP y un año de prisión preventiva. Finalmente, en esta jornada, su defensa —integrada por los abogados Claudio Vera y Alejandra Iragorre— alcanzó un acuerdo de juicio abreviado con la Fiscalía, representada por Micheltorena y Emiliano Pugliese, de la UFI de Delitos Especiales. El tribunal conformado por los jueces Eugenio Barbera, Diego Sanz y Flavia Allende homologó el convenio y fijó la pena.

Durante la formalización del año pasado, Tello sostuvo que el disparo había sido accidental y que ocurrió mientras limpiaba un arma que, según dijo, había comprado al hermano mayor de la víctima. Sin embargo, la investigación fiscal determinó que el imputado estaba efectuando disparos al aire dentro y fuera del domicilio, incluso hacia un tarro que apareció perforado en el fondo de la casa ubicada en calle Necochea y Saúl Quiroga, en el barrio Constitución. Uno de esos tiros impactó en la niña, que jugaba con sus hermanos. Tras herirla, Tello abandonó el arma y escapó, aunque fue detenido pocos minutos después.

El historial judicial del condenado también fue tenido en cuenta: poseía dos condenas previas, una por hurto y otra por abuso sexual de una menor —por la cual estuvo preso siete meses—, además de dos pedidos de captura emitidos por el Tercer Juzgado de Faltas.

La audiencia estuvo marcada por la presencia de la madre de Milagros, quien no pudo contener el llanto mientras Tello admitía su responsabilidad. La querella estuvo representada por Henri Peralta, en nombre de la madre, y Nicolás Gómez Camozzi, en representación del padre de la víctima. Así, quedó firme una condena que cierra un capítulo judicial pero no el dolor de una familia que perdió a una niña en circunstancias trágicas