La explicación detallada de la modernización histórica del sistema de transporte en San Juan

La Cámara de Diputados de San Juan sancionó ayer la nueva Ley de Transporte, una normativa que el Gobierno provincial considera esencial para modernizar y ordenar el sistema de movilidad en la provincia. Tras la aprobación, Marcelo Molina, secretario de Tránsito y Transporte, expresó su satisfacción por haber cumplido con una de las tareas encargadas por el gobernador Marcelo Orrego desde el inicio de su gestión. 

"Si vamos a crecer, tenemos que tener un transporte eficiente, un transporte moderno. Lo que tenemos que lograr es tener un transporte moderno y eficiente, y no podíamos con el desorden que teníamos", aseguró Molina en el programa Mesa Chica, que se emite todos los jueves en el canal +Medios de YouTube.

Molina detalló que la nueva ley, que ahora entra en fase de reglamentación cuyo fin debe estar en 120 días, aborda y soluciona varios problemas estructurales que aquejaban al sistema anterior, incluida la desvirtuación de licencias y la falta de adaptabilidad tecnológica. 

El foco principal de los cambios se centró en el sector de taxis y remises, donde se había generado un "negocio paralelo con el alquiler de licencias". El secretario explicó que "se había desvirtuado el sistema y se había generado en el sentido de que aquella licencia de taxi que te daba a vos para trabajar, había desaparecido y había aparecido aquel que pudo comprar y que compró y alquiló cientos de licencias". La nueva legislación busca reordenar la tenencia de las licencias, asegurando que sean los prestadores reales quienes las exploten y poniendo fin a prácticas como el "contrato de vínculo" que buscaban evadir la ley laboral.

Una de las incorporaciones más solicitadas por el sector es la posibilidad de utilizar autos de cinco puertas para el servicio de taxi, algo que estaba prohibido en la ley anterior. Molina destacó que esto hace a los vehículos "más ágiles para el servicio" y "más económico a la hora de invertir" para los trabajadores, y que se trabajará en la reglamentación para dejarlo plenamente habilitado. 

Además, la ley garantiza la libertad de contactabilidad para los choferes, eliminando la obligatoriedad de estar adheridos a una sola agencia. Esto significa que los taxistas y remiseros podrán recibir viajes de plataformas como Uber, DiDi, Cabify y Oeste X, o cualquier otra que se incorpore, permitiendo al trabajador "hacer negocio con alguien que le cobren menos comisión o le den más o le den viajes." El Estado se encargará de controlar la profesionalidad de quienes se inscriban, utilizando la base de datos del registro profesional de conductores.

En cuanto al servicio de colectivos, aunque la Ley de Transporte apunta a reordenar todo el sistema, Molina aprovechó para repasar las mejoras que ya se venían implementando en la Red Tulum, la cual calificó como una "buena idea" pero con una "mala implementación" inicial. Resaltó la incorporación de tecnología para el pago, saliendo del "medio de pago cerrado" a uno abierto que permite pagar con QR, con billetera virtual, con tarjeta de crédito, y el compromiso de seguir incorporando tecnología en las unidades. Además, Molina hizo hincapié en el éxito del boleto gratuito educativo, destacándolo como un "patrimonio de todos los sanjuaninos" que garantiza que el transporte no sea un impedimento para el estudio.

Finalmente, el secretario señaló que uno de los cambios más trascendentales es el enfoque de la nueva ley, que a diferencia de su antecesora (la Ley 814) no es "reglamentarista". La ley anterior fijaba detalles muy específicos, dificultando los cambios posteriores. La nueva normativa es "un poco más amplia o un poco más marco", lo que permitirá a la autoridad de turno adaptarse rápidamente a los avances tecnológicos. En este sentido, se incorporó una visión a futuro: el funcionario indicó que se ha dejado abierta la puerta para que, en un "futuro cercano, se pueda incorporar a los autos autónomos". 

Tras la sanción legislativa, Molina informó que la tarea inmediata es la reglamentación de la ley, que definirá la "letra fina", e invitó a las personas del sector a participar activamente en este proceso.