San Juan: Le hizo un escándalo a su ex, le encontraron dr0ga, lo metieron preso, pero ella quedará libre

El sanjuanino cumple condena, pero problemas de salud está en su casa.

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Liliana Loyola
Liliana Loyola

A fines de septiembre de este año, una sanjuanina que tenía prohibición de acercamiento para su ex, interrumpió en su casa, ocasionó destrozos y terminó imputada en la Justicia. Este miércoles, la abogada María Filomena Noriega llegó a un acuerdo con Fiscalía y Liliana Loyola no cumplirá condena en el Servicio Penitenciario Provincia (SPP).

La mujer reconoció su responsabilidad en el delito de desobediencia a una orden judicial, en un acuerdo alcanzado entre su defensora, Noriega, y la fiscal María Paula Carena, que fue homologado por el juez Ricardo Grossi Colombo. 

"Loyola tuvo un impulso, nada más. No era aceptable que terminara en prisión efectiva", consideró la letrada en diálogo con DIARIO MÓVIL. 

El hecho ocurrió el 30 de septiembre, en la Villa 1° de Mayo, en Chimbas, cuando Loyola rompió la puerta de la vivienda de Alejandro Alcayaga, lo enfrentó en una escena de celos y causó destrozos. Su irrupción derivó en un operativo policial que terminó cuando los efectivos se toparon con 594 gramos de cocaína dentro del inmueble, lo que comprometió gravemente a su ex pareja, Alejandro Alcayaga.

Filomena Noriega en Tribunales

Loyola también fue detenida, aunque con el avance del expediente se desestimaron las acusaciones por violación de domicilio y daños, quedando firme solo la imputación por desobediencia, según conoció DIARIO MÓVIL por fuentes judiciales. 

La situación judicial de Loyola se agravó semanas después, cuando fue detenida nuevamente el 10 de noviembre en un operativo por drogas ordenado por la Justicia Federal, donde también quedó detenida su hija por presunta comercialización de estupefacientes. Por esa causa, Loyola cumple prisión preventiva domiciliaria, medida que continuará vigente más allá de la reciente condena en Flagrancia.

En cuanto a Alejandro Alcayaga, su situación se resolvió el 11 de noviembre mediante un juicio abreviado en el fuero federal. Allí fue condenado a 1 año de prisión efectiva (también domiciliaria por razones de salud) por tenencia de estupefacientes, luego de que se modificara la acusación inicial por comercialización. Así, tanto él como Loyola permanecen bajo regímenes de arresto domiciliario mientras avanzan las distintas causas que los involucran.

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