La historia de Micaela: de un diagnóstico crítico a una notable mejoría que conmueve a San Juan

Micaela González, una niña sanjuanina de 5 años, fue diagnosticada en julio con un tumor inoperable en el tronco encefálico, una patología grave que suele presentar bajas probabilidades de recuperación.

Micaela
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Micaela González, una niña sanjuanina de 5 años, fue diagnosticada en julio con un tumor inoperable en el tronco encefálico, una patología grave que suele presentar bajas probabilidades de recuperación. Sin embargo, en los últimos meses su estado de salud experimentó una mejoría que sorprendió tanto a su familia como a los profesionales médicos que la atienden.

La pequeña había comenzado un tratamiento de radioterapia y corticoides en el Hospital Juan P. Garrahan de Buenos Aires. Según relató su madre, Samantha Sánchez, las resonancias realizadas durante el proceso mostraron cambios significativos: “De la primera a la última resonancia, el cambio fue impresionante. El tumor ya está casi completamente eliminado”, señaló.

Mejoría y seguimiento médico
Tras semanas de tratamiento, Micaela comenzó a recuperar movilidad y actividad cotidiana. Actualmente retomó su rutina escolar y mantiene controles médicos periódicos para evaluar su evolución. La oncóloga responsable del caso, según indicó la familia, expresó su sorpresa por la velocidad y magnitud de la recuperación.

La dimensión espiritual del caso
A lo largo del proceso, la familia apeló a la fe y atribuye la mejoría de la niña a la intercesión de Carlo Acutis, un joven italiano fallecido en 2006 y canonizado en 2025. La madre contó que comenzó a rezarle durante los momentos más críticos y que la propia niña mencionaba al joven santo.

El Arzobispado de Mendoza, consultado por la familia y por feligreses, manifestó que la situación es considerada “extraordinaria”, aunque no se informó sobre la apertura de un proceso formal para evaluar un eventual milagro. En Argentina, la figura de Carlo Acutis ha cobrado relevancia en los últimos años, especialmente entre jóvenes creyentes, y en Mendoza avanza la construcción de un templo en su honor.

Fe, acompañamiento y comunidad
El entorno de Micaela acompañó el proceso con cadenas de oración y apoyo comunitario. La familia agradeció a quienes colaboraron y expresó que continuará con los controles médicos mientras mantiene sus prácticas de fe.

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