Borussia, más que un grupo de amigos, una gran familia

En la liga ADEPU, donde el deporte y la camaradería se entrelazan, hay equipos que representan a la perfección el espíritu del fútbol amateur. Uno de ellos es Borussia, un grupo que nació hace 15 años y que hoy trasciende lo deportivo para convertirse en una verdadera familia.

Leandro Gómez Navas, Silvio López y Juan Sarmiento, tres de sus referentes, pasaron por los micrófonos de Bonus Deportivo y compartieron la historia y el sentimiento que los une dentro y fuera de la cancha.

“Somos como 90 flacos, tres equipos que todos los fines de semana van a competir, y así fue desde que lo iniciamos con Juan”, contó Leandro, quien recuerda con orgullo los primeros pasos del equipo. “Jamás imaginamos que íbamos a llegar a esto. Hoy hay gente que nos apoya, que cocina para nosotros y nos acompaña. Nunca pensamos que íbamos a generar tanto”.

Para ellos, Borussia representa una forma de vida. “Nos une la amistad y los valores que trae el deporte. Lo nuestro trasciende más allá del fútbol, es una convivencia sana que se sostiene por el gusto de compartir con amigos”, expresó Juan. A lo que Leandro agregó: “Es una cuestión generacional, se vive en casa. Tenemos ropa del equipo, esperamos toda la semana hasta que llega el partido y organizamos el tercer tiempo. Todo eso es Borussia”.

Desde lo amateur, el grupo busca mantener una esencia profesional. “Tratamos de llegar lo mejor preparados posible, organizándonos con los horarios de todos, porque trabajamos y tenemos familias. Somos un club de amigos, pero lo vivimos con pasión y compromiso”, señaló Silvio.

El sentido de pertenencia y la solidaridad son parte de su identidad. “Cuando un compañero pasa por un mal momento, todos salimos a ayudar. Hemos hecho colectas, acompañamos a quienes lo necesitan. Borussia está siempre presente”, destacó Juan, mientras Silvio recordó una reciente campaña solidaria organizada por el grupo.

Entre los recuerdos más emocionantes, Leandro rememoró el viaje al regional en San Luis, una experiencia que los marcó a todos: “Éramos 40 entre jugadores e hinchas. Jugamos cinco partidos y la gente estaba con bombos, haciendo el asado, alentando todo el tiempo. Jugar en el Estadio La Pedrera fue mágico, algo que nunca vamos a olvidar”.

Con una historia marcada por la unión, el compromiso y la amistad, Borussia demuestra que en el fútbol amateur también se construyen grandes familias.

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