Lo que se sabe hasta el momento del empresario sanjuanino al que le quitaron la vida

El asesinato de Sergio Mariano Nacenta, ocurrido en la madrugada del sábado 20 de septiembre en Las Heras, Mendoza, conmociona tanto a esa provincia como a San Juan, de donde era oriundo el empresario. La víctima fue hallada dentro de su camioneta Toyota Hilux con un disparo en la cabeza, tras un episodio rodeado de incertidumbre y pistas que todavía no encajan.

Vecinos de Paso Hondo y Recuero contaron que, horas antes del crimen, lo vieron desorientado y preguntando por el “Penal de Mujeres”, un lugar que ya no funciona como cárcel, sino como centro de contención para mujeres que recuperan la libertad. Según trascendió, en ese momento mantenía una comunicación telefónica con una adolescente que habría guiado sus pasos. Esa joven sería hija de Matías Exequiel Alonso Jara, apodado “Negro Matías”, quien fue detenido poco después e imputado como el principal sospechoso.

Jara, de 32 años, fue arrestado en el barrio Santo Tomás de Aquino, ubicado frente al sitio que buscaba la víctima. Durante el allanamiento en su vivienda, los investigadores secuestraron celulares, un cañón de carabina calibre .22, cargadores y una mira telescópica. Testigos, además, lo ubicaron en la escena del hecho. La fiscal Andrea Lazo sostiene que el empresario pudo haber sido víctima de una emboscada, y que fue llevado deliberadamente hasta la zona donde terminó asesinado.

El detenido tiene un extenso historial delictivo que incluye portación ilegal de armas, coacciones y lesiones graves. Había recuperado la libertad en junio de 2024, tras cumplir una condena unificada de tres años y medio de prisión, pero ahora quedó en el centro de un caso mucho más grave. La Justicia lo imputó por homicidio criminis causa en concurso real con tentativa de robo agravado, una de las figuras más severas del Código Penal, que prevé prisión perpetua.

Los vecinos que escucharon el estruendo de la madrugada pensaron que se trataba de un accidente, ya que la camioneta de Nacenta cayó en una acequia. Sin embargo, al acercarse descubrieron la herida de bala y el vidrio destruido del lado del conductor. Desde entonces, las pericias al teléfono de la víctima se volvieron claves para establecer con quién habló en sus últimos minutos y si fue citado con engaños al lugar donde lo atacaron.

Nacenta, reconocido productor de semillas en Pocito, deja a su familia en medio de la conmoción y el reclamo de justicia. Por ahora, el caso plantea más preguntas que certezas: qué hacía en ese barrio, quién lo contactó y cómo fue sorprendido en una madrugada que terminó de manera trágica. La sociedad espera respuestas y definiciones en una causa que recién comienza a desentrañarse.