Atrapan a un hombre acusado de quitarle la vida al empresario sanjuanino en Mendoza

El violento crimen que terminó con la vida de Sergio Marcelo Nacento, empresario agrícola sanjuanino de 59 años, tuvo este domingo un giro decisivo. La División Homicidios de Mendoza detuvo en el barrio Santo Tomás de Aquino, en Las Heras, a Alonso Jara, un hombre de 32 años que quedó bajo la lupa de la fiscal Andrea Lazo como principal sospechoso. El detenido será imputado en las próximas horas por homicidio criminis causa, delito que contempla prisión perpetua. Nacento fue hallado muerto en su camioneta Toyota Hilux, en la zona de El Borbollón, con un disparo calibre 9 milímetros. Según reconstruyó el medio mendocino El Sol, al momento del ataque la víctima hablaba por teléfono con una adolescente, lo que abrió una de las hipótesis más fuertes: que el empresario pudo haber sido atraído hasta el lugar como parte de una emboscada. Trascendió que la joven sería hija del propio Jara, lo que refuerza las sospechas en su contra.

Durante los allanamientos posteriores a la detención, los investigadores secuestraron teléfonos celulares, un cañón tipo carabina calibre 22, cargadores y una mira telescópica, elementos que serán sometidos a peritajes para determinar si guardan relación con el asesinato. Testigos, además, habrían ubicado a Jara en las inmediaciones de la escena del crimen, lo que consolidó la sospecha de su participación directa. Su historial delictivo añade mayor gravedad al caso. Desde diciembre de 2016 acumuló causas por portación ilegítima de armas, violación de domicilio, amenazas, coacciones agravadas y lesiones graves con armas de fuego. En 2023, la Justicia unificó esas causas en una condena de tres años y seis meses de prisión, pena que cumplió hasta junio de 2024, cuando recuperó la libertad. Apenas tres meses después de salir de la cárcel, vuelve a estar involucrado en un hecho de máxima violencia.

Nacento era un empresario agrícola con reconocimiento en el sector productivo de San Juan y vínculos comerciales en Mendoza, provincia en la que solía moverse por cuestiones laborales. Su muerte conmocionó a ambas comunidades y generó un fuerte impacto por las circunstancias en que ocurrió. La fiscal Lazo prepara la imputación formal de Jara y trabaja sobre los cruces de comunicaciones de los teléfonos secuestrados, clave para confirmar la hipótesis de la emboscada y determinar si hubo participación de otras personas.

La investigación todavía deja abiertas múltiples incógnitas: cuál fue el motivo del ataque, si el sospechoso actuó solo o con cómplices y qué papel tuvo la joven con la que Nacento se comunicaba poco antes de ser asesinado.