
De acuerdo con los primeros reportes, la víctima fue hallada boca abajo, con una bufanda en el cuello y múltiples puñaladas en la espalda.
Pablo Ariel Lara, con más de 30 años de experiencia, sufrió un impacto fatal durante un vuelo. La Justicia investiga una posible falla técnica y descartó responsabilidad de terceros.
Un lamentable hecho se registró este fin de semana, cuando Pablo Ariel Lara, experimentado parapentista sanjuanino, sufrió un grave accidente que terminó con su vida en estado crítico. A dos días, fuentes judiciales confirmaron que Lara presenta muerte cerebral tras impactar contra un cerro y caer en el predio del Club de Kayak.
El accidente ocurrió alrededor de las 16 horas durante un vuelo desde una altura aproximada de 1000 metros. Según testigos, mientras Lara y su grupo planeaban, él perdió el control y chocó contra el suelo dentro del sector de la Usina Hidroeléctrica, en el interior del club.
Una compañera que lo acompañaba relató que, al llegar al lugar, encontró a Lara inconsciente y con el equipo bien colocado, aunque sospecha que la vela pudo haberse cerrado durante el planeo, lo que habría provocado la caída.
Lara, con más de 30 años de experiencia y miembro activo de la Asociación Argentina de Vuelo Libre, acostumbraba a realizar esta actividad junto a sus amigos cada fin de semana.
La investigación, a cargo del fiscal Francisco Nicolía y la ayudante Gemma Cabrera, descartó la participación de terceros, por lo que la hipótesis más fuerte apunta a una falla técnica o un problema en el equipo durante el vuelo.
De acuerdo con los primeros reportes, la víctima fue hallada boca abajo, con una bufanda en el cuello y múltiples puñaladas en la espalda.
Emanuel Gustavo Muñoz, de 25 años, fue hallado sin vida en su casa del Barrio La Estación. Las pericias forenses descartan indicios de un homicidio y señalan una posible autolesión.
Un inusual hallazgo causó alarma este lunes en el barrio Los Horcones, Rawson, luego de que un niño encontrara una granada y la llevara a su casa.
Yesica Noemí Malla, madre de dos pequeños, enfrenta un cáncer de mama con metástasis y atraviesa una compleja situación económica. Necesita fondos para cubrir alimentación, viajes y estudios médicos.
Durante un control de tránsito, la policía detectó que la licencia de conducir y el certificado de revisión técnica que mostraba un conductor de 76 años no eran auténticos.