A pesar de las vacaciones, muy poco público en los cines

Las vacaciones de invierno 2025 dejaron un panorama desalentador para la industria cinematográfica argentina. Las salas de cine no lograron superar la barrera de los 5 millones de tickets vendidos, un registro que no se veía desde hace más de diez años, con excepción de los períodos atravesados por la pandemia.

Entre los motivos de la caída se encuentran los altos precios de las entradas, que en el AMBA promedian $15.000. Para una familia tipo, una salida al cine implica cerca de $60.000, sin contar consumos adicionales como pochoclos o bebidas. Si bien las salas independientes y los espacios INCAA ofrecen tarifas más accesibles, su presencia es limitada en gran parte del país.

La cartelera invernal tampoco acompañó. Solo Superman y Los 4 Fantásticos: Primeros pasos se estrenaron durante el receso escolar, mientras que los otros grandes títulos ya estaban en cartel desde semanas previas, lo que restó atractivo a la programación. A esto se suman problemas estructurales que afectan al sector: escasa oferta de películas subtituladas, horarios poco convenientes y una programación que no siempre prioriza al público local.

El balance anual tampoco es optimista: entre enero y junio se vendieron 16,2 millones de entradas, un 6 % menos que en 2024, lo que evidencia un año complejo para la exhibición cinematográfica en Argentina.