"Tengo VIH, no soy un peligro": historia anónima, para romper prejuicios de una patología que crece en San Juan

Cada vez que una persona se entera que vive con VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana), no solo enfrenta un diagnóstico médico, sino que enfrenta prejuicios, desinformación y miedo. En San Juan, los últimos datos encendieron una luz de alerta sobre la necesidad urgente de educar, prevenir y testear a tiempo. Especialistas de nuestra provincia advierten que, aunque los tratamientos avanzaron notablemente, la desinformación y la falta de testeos continúan siendo los principales enemigos para frenar el virus.

DIARIO MÓVIL habló con Lorena Herrera, bioquímica y referente del Programa de VIH, Sífilis y Hepatitis del Ministerio de Salud la provincia, y con Alejandra Cordero, licenciada en Gestión Educativa y especialista en Educación Sexual Integral (ESI). Ambas remarcaron que, aunque los tratamientos avanzan y permiten llevar una vida plena, los principales enemigos hoy son la desinformación y la falta de percepción del riesgo.

Pero además, esta nota incluye la voz anónima de una persona que vive con el virus en San Juan, quien decidió romper el silencio para ayudar a otros. 

Vivir con VIH: más estigma que síntomas

“El día que me dieron el diagnóstico, no me quebré por lo médico. Lo que más me dolió fue pensar en cómo iba a decirlo, cómo me iban a mirar, si alguien me iba a querer igual. No soy un peligro, no estoy enferme todo el tiempo. Estoy tratando, estoy indetectable, y puedo vivir como cualquier otra persona", enfatizó M. (quien prefirió resguardar su identidad). 

“Cuando te dicen que tenés VIH, lo primero que pensás es que vas a estar solo. Yo no lo conté enseguida, me llevó meses. Y no porque me sintiera mal físicamente, eso vino después. El problema fue emocional. En mi cabeza, tenía mil preguntas, ¿me van a rechazar?, ¿van a pensar que soy promiscue o drogadicte?, ¿cómo explico que solo tuve relaciones sin cuidarme?”, añadió M. a este medio. 

Además, sostuvo que recibió el tratamiento gratuito en el sistema público. A poco tiempo del diagnóstico, comenzó a tomar antirretrovirales y logró alcanzar una carga viral indetectable, lo que significa que no puede transmitir el virus. "Con el tratamiento, te controlás. Pero con el miedo de los otros, con los prejuicios, eso es más difícil. A veces preferís callarte. Pero callarte también enferma", lamentó. 

Por otra parte, expresó que romper el silencio también salva vidas. "No soy una estadística. Soy una persona. Y quiero que otras personas sepan que pueden vivir bien, que hay tratamiento, que se puede amar, trabajar, reír", expresó.

"Pero, sobre todo, que se puede hablar. Porque el silencio también mata”, concluyó M., quien pidió que su historia sirva para generar conciencia.

Los datos preocupantes en San Juan

En San Juan, los casos de VIH están en alza. "Es una epidemia que está presente, que tiene mismas características que a nivel nacional y mundial. Hay nuevos casos todos los años, pero aumentan de a poco. No es un brote, sino que las infecciones nuevas, siguen siendo todos los años la misma cantidad, son un poquito más. Esto quiere decir que quizá la estamos controlando, pero no bajando o eliminando y es en lo que debemos trabajar", mencionó Lorena Herrera a DIARIO MÓVIL.

En el país, se estima que hay 144.000 personas que conviven con el virus. Sin embargo, el 13% de las personas de esa cifra desconoce que están infectadas. "Entonces, muchas acciones de prevención y aumentar la oportunidad de diagnostico, desde el Ministerio estamos enfocados en eso. Debemos salir a buscar a esas personas que desceonocen y no tienen percepción del riesgo como para pensar que pueden estar infectadas", consignó. 

Con ese panorama, hay que destacar que, en San Juan, se registran 143 casos por año (de acuerdo a los últimos datos obtenidos del 2023). "Esa es la media que tenemos por año. Estos se suman a todos los que ya tenemos, que son alrededor de 800 pacientes que están en el sistema público atendidos", detalló. 

Además, en el país, hay una tasa de 14 cada 100.000 habitantes diagnosticados. En nuestra provincia, la cifra es más alta, ya que los datos están por encima de la media nacional, con casi 18 cada 100.000 habitantes diagnosticados (precisamente el 17,7%). 

"Y si vamos a la oportunidad del diagnóstico, estamos llegando tardíamente. O sea, las perosnas llegan con las defensas bajas. A nivel nacional, el 45% de los diagnosticos nuevos son tardíos, en San Juan es casi del 50%", advirtió Herrera. 

Bandera roja en San Juan

El Laboratorio del Hospital Rawson recibe todos los testeos de VIH en San Juan

Eso, desde el Ministerio de Salud, lo toman como una bandera roja, por lo que se debe actuar más profundamente. ¿Cómo?. Herrera sostuvo que deben amplair el kit de diagnóstico y sensibilizar a los equipos de salud y a las personas para que lleguen al diagnóstico temprano. "Quizá al médico, si llega un paciente con bajo peso, se le ocurra pensar en una diabetes, antes que de VIH. Es un trabajo que venimos haciendo hace años, pero se tiene que mejorar", comentó. 

Otro punto a tener en cuenta, es el sector en que se atienden las personas en nuestra provincia. En San Juan, casi 70% recurren a hospitales o centros de salud públicos, mientras que el resto mantiene un tratamiento en el sector privado. Esta cifra es casi simliar a la media nacional que ronda el 65% y un 35%, respectivamente. 

"Lo medimos a través de un registro de salud, llamado SVIH, que es un registro nacional, perteneciente a la Dirección Nacional de VIH", resaltó, respecto a la fuente de datos. 

Herrera lleva 25 años de experiencia como bioquímica en el Laboratorio de Bioreferencia de la provincia, en el Hospital Rawson, donde evidenció el crecimiento de casos, hasta la actualidad. "Año a año, ha ido aumentando, poquito a poquito", destacó. 

Tras el diagnóstico, qué se hace

Entre las acciones que realizan, son las campañas de testeos, para generar conciencia, pero no es lo principal. "Lo que nos ayuda es que, en la provincia, aumentamos los kits rápidos de testeos, en lugares de la periferia, que no tienen laboratorios pero sí un consultorio de enfermería, donde cuentan con un equipo de salud, capacitado para una consejería y testear con métodos rápidos. 

"Con eso estamos facilitando el acceso, ya no hace falta que una persona vaya a un lugar con laboratorio, que pida turno. A esto le sumamo que es por demanda espontánea, es decir, no necesita indicación de un médico", destacó. 

"Una vez que una persona se diagnostica como positiva, también, ofrecemos el tratamiento cuando no tiene cobertura de obra social", consignó. 

Las estrategias para frenar la transmisión en San Juan

Herrera explicó que llegar a tiempo al diagnóstico permite iniciar un tratamiento que reduce la carga viral hasta volverla indetectable. Esa situación, conocida como I=I (Indetectable = Intransmisible), es fundamental para cortar la cadena de transmisión.

Además, hizo hincapie en el uso de preservativos, que hasta son ofrecidos de manera gratuita en centros de salud. Y otra es la medicación de profilaxis, para pesonas con exposición de riesgo, en relaciones consentidas o no. "Pueden acercarse a una guardia u hospital, solicitar la medicación, que son antiretrovirales. Si los toman dentro de las 72 horas, en el caso de que haya habido una transmisión, bloquea el virus. Eso ha demostrado que puede disminuir la tasa de infección", aseguró. 

También, está la medicación preexposición, que es para personas que tienen conductas a exponerse, ya sea por tener una pareja serodiscordante, que no toma medicación y con carga viral detectable o porque mantienen prácticas de riesgo. Pueden obtener el remedio, que también es antiretroviral y puede bloquear la infección. 

Cuándo consultar a un médico y testearse

No hay que dejar pasar tiempo y esperar síntomas. Herrera advirtió que las personas que tengan la mínima percepción de riesgo, deben testearse.

"Es un virus que ingresa y ataca el sistema inmunológico, pero si este es competente en una persona, puede darle batalla o controlarla, no aparecerán síntomas. Entonces, hay que tener en cuenta si estuve con una persona que no sé si estuvo con otras, si hay adicciones, entre otros factores", recomendó. 

De todos modos, los síntomas también pueden tenerse en cuenta. "Hay personas que pueden llegar a tener como si fuese una mononucleosi, glándeos inflamados, pero son muy generales, no por eso debo sospechar que es una infección de VIH", manifestó. 

Lo que debes saber del VIH: cómo se transmite, cómo prevenir, los vulnerables y más

Por su parte, la educadora, Alejandra Cordero, consignó a través de DIARIO MÓVIL que el VIH "actúa debilitando las defensas de nuestro organismo y favoreciendo el desarrollo de enfermedades. Solo puede transmitirse de persona a persona".

Alejandra Cordero, licenciada en Gestión Educativa y especialista en Educación Sexual Integral (ESI)

Al destacar los modos de contagio, la especialista describió cada una de las secreciones que lo hacen, como así también, las que no generan transmisión de la patología. "Este virus vive en las distintas secreciones de nuestro organismo, pero no todas lo pueden transmitir. Las que sí lo hacen son la sangre (incluída la menstruación), el líquido preseminal y el semen; la secreciones vaginales y la leche materna", advirtió. Los que no lo transmiten son la saliva, sudor, lágrimas o la orina. 

"El VIH no se contagia, se transmite, es decir, que no es hereditario. Va a ingresar a nuestro cuerpo al tener relaciones sexuales anales, vaginales u orales, donde no se haya usado preservativo; cuando la sangre de una persona que tiene el virus entra en contacto con la nuestra, como en un accidente; o de la madre a un hijo, puede transmitirse en el embarazo, en el parto o en la lactancia", precisó.

Entendiendo las modalidades de contagio y los prejuicios hacia quienes padecen de VIH (como mencionó M.) Cordero resaltó que "no puede ingresar a nuestro cuerpo por besar o abrazar, compartir mate, tener contacto con lágrimas o sudor, con picada de mosquito, si compartimos pileta y, aún, si tienen relaciones sexuales. Si se usa preservativo, no puede ingresar a mi organismo", destacó. 

El VIH en el embarazo

Como bien mencionó Cordero, anteriormente, la enfermedad no es hereditaria, pero puede transmitirse por intermedio de la secreción vaginal o la lactancia.

Por lo tanto, una persona gestante, al momento de enterarse que es positiva en el virus, debe tener recaudos muy importantes, para no perjudicar a su hijo. 

"Una mamá, de repente, se entera que tiene el virus, debe hacer un tratamiento después del 3er mes de gestación. Después se debe realizar una cesarea, porque el bebé no puede exponerse a las secreciones vaginales y no debe darle leche materna, para que no se transmita", indicó. 

Los principales causantes de la transmisión del VIH

Hay muchos factores que provocan la transmisión del virus. Sin embargo, Cordero asegura que la principal causa es la no concientización, al momento de utilizar cuidados en las relaciones sexuales. 

"En primer lugar se debe por la disminución del uso del preservativo. Hay una tendencia creciente, entre jóvenes, a no usar protección. Lo que incrementa el riesgo de transmisión del VIH y de otras enfermedades de transmisión sexuales", expuso. 

"Esto se relaciona con una falsa sensación de seguridad o el desconocimiento. Por eso, es muy importante el seguir incluyendo la Educación Sexual Integral, que es la manera de enseñarles a manejarse en una vida sexual activa responsable", manifestó. 

Además, entre otras causas, expuso la falta de campañas de prevención y concientización. "No son constantes y no llegan de manera efectiva a toda la población, sobre todo, a sectores vulnerables. En muchos ámbitos escolares y sociales, aún, no se aborda de forma adecuada", advirtió.

Por otra parte, Cordero afirmó que el crecimiento de la transmisión se puede ocasionar por la "desinformación" y por la "discriminación". Pues, muchas personas tienen miedo a testearse o buscar un tratamiento, para no ser "rechazados" socialmente. "Eso atrasa el diagnóstico y dificulta el tratamiento", expuso. 

"Incluso, muchas personas pueden tener el VIH y, sin saberlo, lo están transmitiendo. Muchas veces lo hacen sin intención, porque no están enterados", consignó. 

Entre otras causas, mencionó los cambios en prácticas sexuales, uso de aplicaciones de cita, parejas ocasionales y hasta la combinación de relaciones con consumo de sustancia.

"Creo que el crecimiento de los casos se debe a una combinación de factores sociales, culturales, estructurales. Para revertir esta situación, sería fundamental fortalecer la educación sexual; garantizar un acceso más equitativo al servicio de salud; promover el uso del preservativo; combatir la estigmatización, porque todos estamos expuestos, pero siempre hay factores que nos hacen más vulnerables", constató.

En esa línea, se refirió a la pobreza, "ya que cuesta más llegar a un centro de salud, recibir preservativos, charlas informativas" y, también, a la juventud, "que se sienten más confiados"; y los consumidores de drogas, "que al momento de mantener relaciones están inhibidos de actuar de manerea conciente", manifestó. 

Otras enfermedades de transmisión sexual, en foco

A diferencia del VIH, otras patologías de transmisión sexual mantienen datos alaramantes, aún más grandes. El caso de la Sífilis, por ejemplo, son 10 veces más que el VIH. 

"Esta se cura y se reinfecta si siguen con la misma práctica, pero con un tratamiento barato se cura con penicilina . Muchas veces, una mujer embarazada por no pensar en hacerse análisis, transmite la enfermedad al bebé, que es mucho más difícil curar", advirtió la bioquímica, Lorena Herrera.