Temor entre los trabajadores de Correo Argentino en San Juan: ¿qué pasará con ellos?

El proceso de privatización del Correo Argentino, impulsado por la gestión de Javier Milei, ha comenzado a generar serias preocupaciones entre los 200 empleados del servicio postal en San Juan. A medida que avanza la desregulación total del servicio, que afecta tanto a la infraestructura como a los puestos laborales, los trabajadores se encuentran enfrentando un panorama incierto sobre su futuro profesional.

Alberto Barboza, secretario Adjunto de la Asociación Argentina de Trabajadores de las Comunicaciones (AATRAC) en San Juan, explicó que los empleados viven una gran incertidumbre: "Somos alrededor de 200 empleados más o menos. Las actividades son muy variadas, desde el distribuidor, que es el cartero, hasta tareas internas, como los administrativos, los que reciben la correspondencia y la encaminan hacia la oficina correspondiente". Para Barboza, las dudas sobre el futuro del Correo son constantes: "Es complicado, no sabemos qué va a pasar. Desde que se empezó a hablar de la privatización, la gente tiene miedo de perder su trabajo, de que el correo desaparezca o de que se queden sin tareas".

Este clima de incertidumbre ha sido exacerbado por los recientes anuncios del Gobierno Nacional. A pesar de que el Correo Argentino fue finalmente excluido de la Ley Bases de privatización, el desmantelamiento del servicio postal sigue en marcha. Barboza señala: "Nosotros veníamos diciendo que el gobierno iba a avanzar con la privatización del correo desde su campaña. Aunque no se concretó en la Ley Bases, el proceso sigue, y eso nos genera temor". La desregulación anunciada por el Ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, es otro factor que ha aumentado la preocupación entre los trabajadores. "El Gobierno habla de desregulación, pero ya se venía haciendo desde los años noventa, cuando Cavallo estaba al mando", sostiene Barboza.

En San Juan, la situación es especialmente crítica, ya que las delegaciones del Correo Argentino en varias zonas ya han comenzado a cerrar. Barboza comentó sobre esta situación: "Desde marzo ya se están cerrando oficinas. Por ejemplo, la de Pocito, cuando se fue el personal comercial, se cerró automáticamente". Además, advirtió que en algunos departamentos más alejados de la capital, como Iglesia, las condiciones laborales son precarias. "En Iglesia, solo queda un jefe para varias oficinas. Lo mandan a recorrer con su propia movilidad y a veces ni siquiera le alcanzan los fondos para el combustible. No lo amenazan directamente, pero la situación está tan mal que se sienten presionados", expresó.

Sobre los efectos de la privatización, Barboza agregó: "El impacto es el mismo que tuvimos en los noventa: más desocupación, más gente sin trabajo, y lo que es peor, el servicio no mejora. En esos momentos, lo único que hubo fue un negociado entre el gobierno de turno y las empresas privadas, que aprovecharon la situación". A pesar de estos desafíos, el gremialista mantiene que el sindicato sigue luchando para proteger los puestos de trabajo, aunque aclaró: "No estamos llamando a un paro por ahora. Lo que queremos es hacer escuchar nuestra voz y que se respete el derecho de los trabajadores".

El futuro de las oficinas postales en San Juan y en otras partes del país sigue siendo incierto, y los trabajadores continúan en estado de alerta ante una posible privatización. "El correo es fundamental, no solo para los trabajadores, sino para las comunidades. Si esto sigue así, muchos lugares se quedarán sin este servicio esencial", concluyó Barboza.

Fuente:
Entrevista a Alberto Barboza, secretario Adjunto de la Asociación Argentina de Trabajadores de las Comunicaciones (AATRAC), Seccional San Juan. Radio Colón, 2024.