En el barrio La Estación, dos hermanos le robaron los salames a un vendedor ambulante

Dos personas atacaron al trabajador con un cuchillo exigiéndole la mercadería y el dinero. Uno fue condenado a cumplir condena al Penal de Chimbas.

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Imagen ilustrativa

Un incidente de robo en el Barrio La Estación, en Rawson, terminó con condenas para dos hermanos, Eduardo Alberto Pérez y Francisco Ramón Pérez Silva, tras un juicio abreviado. Ambos fueron detenidos luego de que un vendedor ambulante de embutidos denunciara haber sido víctima de un asalto en el que le sustrajeron mercadería y dinero en efectivo.

El incidente ocurrió el domingo, aproximadamente a las 14:00 horas, cuando un vendedor ambulante de salames caseros recorría el barrio ofreciendo sus productos. Al llegar a la vivienda de los hermanos Pérez, Eduardo Alberto Pérez, de contextura robusta, le pidió un salame al vendedor y comenzó a comerlo, manifestando que no pagaría por el producto. El vendedor decidió retirarse, pero poco después fue llamado de nuevo al domicilio por Francisco Ramón Pérez Silva, quien le aseguró que le pagarían.

Al regresar, el vendedor ingresó al domicilio con la esperanza de cobrar su dinero. Sin embargo, una vez dentro, los hermanos Pérez lo encerraron en la vivienda. Eduardo Alberto Pérez lo golpeó en el pómulo izquierdo y, tras tomar un cuchillo, lo amenazó de muerte, exigiéndole la entrega del dinero y la mercadería. Aunque el damnificado logró esquivar los ataques con el cuchillo, fue despojado de nueve salames caseros y aproximadamente $30,000 en efectivo; indicaron fuentes judiciales este martes. 

En un momento de distracción de los agresores, el vendedor logró escapar y se dirigió a la Base Policial Motorizada N° 2, ubicada a unos 400 metros del lugar del incidente, donde denunció el hecho. Gracias a la rápida intervención policial, los hermanos fueron localizados en la vía pública, cerca de su domicilio. Tras un palpado de urgencia, se les encontró parte de la mercadería robada, y fueron arrestados.

Este martes, el caso, llevado por el fiscal Dr. Alberto Martínez, culminó con diferentes resoluciones para los implicados:

A Eduardo Alberto Pérez se le otorgó la suspensión de juicio a prueba por un término de un año. Además, se le impuso una reparación simbólica de $10,000 y la obligación de realizar 20 horas de tareas comunitarias. También se le prohibió el contacto y acercamiento con la víctima, y deberá cumplir con las reglas de conducta establecidas en el artículo 27 bis del Código Penal Argentino.


Mientras que a Francisco Ramón Pérez Silva, a través de un juicio abreviado, fue condenado a cuatro meses de prisión de cumplimiento efectivo. Además, se le unificó la pena con una condena anterior, resultando en una pena única de 10 meses de prisión de cumplimiento efectivo. Actualmente, se encuentra en prisión preventiva.

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