
Tenía 60 años de edad. Un hombre que observó el lamentable momento comunicó cómo fueron los últimos minutos del hombre.
Se trata de Jaqueline Díaz, una docente de inglés que tuvo su último día de clases el pasado martes. Sus familiares y amigos le prepararon un festejo sorpresa.
Después de dedicar tres décadas a la enseñanza, a los exámenes, a las aulas y a la formación de miles de estudiantes, a Jaqueline Díaz finalmente le llegó el día de cerrar una etapa que marcó su vida y dar paso a su jubilación. La querida profesora de inglés tuvo su última clase el pasado martes 30 de septiembre y se despidió envuelta en muestras de afecto que coronaron su trayectoria.
Durante todo septiembre, sus alumnos y colegas de la EPET N°4 y la escuela Arturo Illia, donde dio sus últimos pasos en la docencia, la sorprendieron con homenajes y mensajes cargados de emoción. Pero la despedida no terminó en los pasillos escolares: afuera la esperaba una celebración inolvidable. Además, Díaz trabajó en las escuelas Teniente Ibáñez, Federico Cantoni y Alvar López
Engañada con una excusa por sus hijas, Jaqueline llegó a su casa sin imaginar que allí la esperaban sus seres queridos. Su esposo Roberto Giménez, sus hijos Jaqueline, Geraldine y Roberto Giménez, junto a familiares y amigos la recibieron entre globos, papelitos y aplausos. La alegría se trasladó luego a las calles de Capital con una caravana que culminó en la fuente del Teatro del Bicentenario, donde las fotos y los abrazos sellaron la jornada.
Conmovida, la flamante jubilada agradeció a sus estudiantes de ayer y de hoy, a sus colegas y a toda su familia por el acompañamiento en este cierre de etapa. “Gracias a todos por tantos años de cariño”, expresó con una sonrisa que resumió lo vivido.
Tenía 60 años de edad. Un hombre que observó el lamentable momento comunicó cómo fueron los últimos minutos del hombre.
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