Así quedó el presunto ladrón linchado y atado con alambres: piden la libertad de los responsables

Una protesta encabezada por familiares y allegados de los tres hombres detenidos por la agresión a David Carbajal generó revuelo este miércoles en Chimbas. La manifestación se desarrolló en Ruta 40 Norte, a la altura de la Villa Mariano Moreno, donde los manifestantes cortaron parcialmente el tránsito para exigir justicia por los acusados y denunciar el clima de inseguridad que, según afirman, afecta con frecuencia a los vecinos del lugar.

Con pancartas en mano, uno de los mensajes más visibles fue el que expresaba: “Basta de silencio, basta de miedo”. En medio del corte, varios manifestantes tomaron la palabra para expresar su malestar. La madre de Víctor Firmapaz, uno de los detenidos, denunció una serie de robos sufridos por su familia y relató que los delincuentes actúan con impunidad: “Nos han robado tres veces en este mes. Más de $1.500.000 en herramientas de trabajo que mi hijo necesita para ganarse la vida. (…) Hoy día el chorro roba, y al otro día lo tengo en la esquina haciéndole burla a mi hijo”.

La mujer defendió a su hijo afirmando que no debió haber terminado detenido. “No es justo. Mi hijo no tiene que estar preso. Creo que no se merecía pegarle, creo que se merecía mucho más matarlo”, expresó ante los medios presentes en el lugar.

Frente a estas declaraciones, el propio David Carbajal, quien fue golpeado y abandonado atado en una zona descampada del Villicum, se comunicó con Diario Popular San Juan para dar su versión. Afirmó que fue atacado injustamente y negó haber cometido el robo que se le atribuye. “Me llamaron cuando regresaba de trabajar y me golpearon sin decir una palabra. No les robé nada, fue una equivocación”, manifestó. El joven aportó imágenes que muestran el estado en el que quedó tras la agresión.

Mientras tanto, la investigación judicial continúa. Los tres detenidos —entre ellos Firmapaz— están acusados por tentativa de homicidio agravado. La causa está en manos de la UFI Delitos Especiales. En paralelo, la protesta vecinal también puso en agenda el reclamo por mayor presencia policial y medidas de prevención en una zona que, según los vecinos, se ha vuelto blanco frecuente de hechos delictivos.