"Si es inocente, ¿por qué no ayuda a la Justicia?"

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La madre de Jorge Moreno, el minero asesinado en julio, salió al cruce de las declaraciones de la viuda. El viernes, Pamela Carrizo acusó a sus exsuegros de querer quedarse con la tenencia de sus hijos sólo para cobrar los seguros y la pensión.






Jorge Moreno, el joven asesinado, junto a su pareja Pamela Carrizo.

El viernes pasado, Pamela Carrizo dialogó con la prensa por primera vez después de recuperar la libertad. La viuda de Jorge Moreno, el minero asesinado en julio en un confuso hecho que todavía la Justicia no puede dilucidar, habló en radio Sarmiento y afirmó ser inocente y no tener ningún tipo de vinculación con el hecho. Además, se defendió de las acusaciones acerca de su vida privada y acusó a sus exsuegros que querer obtener la tenencia de sus dos hijos menores para poder cobrar seguros y pensiones del fallecido.

Por el mismo medio radial, esta mañana se expresó María del Carmen Algañaraz, madre de  Moreno. La mujer aseguró que las declaraciones de Carrizo las toma "como de quien vienen" y se defendió de las acusaciones.

"Mi familia y yo tenemos la conciencia tranquila porque todo lo hacemos por los niños. Queremos que esos niños sean hombres de bien como lo fue mi hijo. El dinero a mí no me interesa. El dinero es de los niños, el padre se mató trabajando y eso será de ellos. Yo todavía la vida viví de mi trabajo, no me interesa para nada el dinero. A mí se me murió un niño, con la plata que les den a los niños yo no voy a recuperar a mi hijo y ese dolor lo voy a tener por el resto de mi vida", expresó.

Algañaraz aseguró que Pamela Carrizo "se mostró tal cual es" en las declaraciones a la prensa y que "siempre ha sido una mujer liberal hasta el punto que ahora niega las juntaderas que hacía". Desde el primer momento se ventiló mediáticamente que la viuda de Moreno lo engañaba y que era habitual que en su casa entraran hombres que conocía a través de redes sociales.

"Sus propias amigas lo dicen. Con dos niños en adentro metía a cualquiera a su casa, a gente que recién conocía. La familia de ella también lo sabía. Es más, antes que sucediera esto yo me encontré con la madre de ella y le reclamé por las notas del niño más grande. A mí me dolía el alma al ver las notas del niño y se lo comenté a la madre de ella que me contestó en forma textual 'si yo tuviese plata, me iría a vivir al cerro de la vergüenza'. Entonces ellos algo sabían", consideró la madre de Moreno.

Asimismo contó una anécdota: "Una vez el niño más grande se quiso quedar a dormir en mi casa y me contó que su mamá ponía música fuerte y no lo dejaba dormir, y mi hijo no estaba. Si las propias amigas en las declaraciones decían que tenían juntaderas. Así que si es tan inocente por qué no ayuda a la Justicia a esclarecer el hecho. Tiene cinco declaraciones distintas del hecho. Primero decía que no había visto a nadie y ahora dice que sí, entonces ¿está encubriendo a alguien o qué?", reclamó Algañaraz.

Acerca de sus nietos, la mujer dijo que inició vía judicial el trámite y que el Juzgado le otorgó la tenencia privosoria. "Obviamente que voy a pelear por la tenencia de mis nietos, es lo que me ha quedado de mi hijo. A la vista está todo esto que ha pasado, esto no hubiera sucedido si ella no hubiese tenido esa conducta. Ella le fue infiel, hacía esas juntadas y no le importaba que los niños estuvieran ahí adentro".

"Los niños preguntaron por ella y les dijimos que estaba internada y esas cosas, para no sumarles más sufrimiento. A medida que pasaba el tiempo, el más grande fue entendiendo y entonces les contamos que estaba investigada por la Policía por el tema del papá. Muy rara vez preguntan por ella, aunque sí quieren verla, la sangre les tira obviamente. En ningún momento dije que no quiero que la vean, pero desde que ella salió nadie se comunicó con nosotros", manifestó Algañaraz y añadió que no quiere ver a Pamela Carrizo: "Que haga todo por intermedio del Juez y la Justicia".

Para finalizar, Algañaraz indicó que "los niños corren riesgo" con Carrizo. "Yo viví con ellos, sé cómo trataba a los niños. Si lo tenía que hacer estudiar al niño, era a los gritos; si perdía una goma, era un cachetón. Y cuando estaba sola, hacía lo que quería". Además cerró diciendo que "ella sabe quién lo mató, porque si no diría lo que vio una, dos o diez veces de la misma manera. ¿Por qué tantas contradicciones?"
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