OSSE advierte sobre la disminución en la capacidad de la planta potabilizadora de Marquesado debido a la alta turbidez del agua y solicita a la población un uso racional del recurso.
Diario Móvil
Las lluvias torrenciales que se han registrado recientemente en San Juan están causando complicaciones en la provisión de agua potable, según informó Obras Sanitarias de San Juan (OSSE). El problema principal radica en la planta potabilizadora de Marquesado, cuya capacidad de procesamiento se ha visto afectada por el notable incremento de sedimentos y greda en el agua cruda que ingresa para su tratamiento.
La creciente turbidez del agua representa un desafío técnico para los procesos de potabilización, ya que la mezcla con materiales arrastrados por las lluvias dificulta el filtrado y tratamiento necesarios para garantizar un suministro apto para el consumo humano. En este escenario, OSSE ha solicitado a los habitantes extremar las medidas de cuidado del agua, especialmente en actividades no esenciales, para mantener la operatividad de la planta dentro de parámetros seguros.
El monitoreo constante en la planta de Marquesado se ha convertido en una prioridad, según indicaron desde la empresa estatal, con el objetivo de ajustar los procedimientos de potabilización frente a la alta turbidez. Este control permitirá anticiparse a nuevas complicaciones que puedan surgir mientras persistan las lluvias.
Las autoridades recordaron la importancia de un uso racional del agua durante esta situación crítica. "El compromiso de la comunidad es fundamental para asegurar que todos puedan acceder al recurso en condiciones óptimas de calidad", señalaron voceros de OSSE.
Con la continuidad de las precipitaciones y el consecuente aumento en la turbidez del agua, las recomendaciones incluyen evitar el lavado de vehículos, el riego de jardines y cualquier uso recreativo que implique un gasto innecesario. De esta forma, se busca garantizar que las reservas disponibles sean suficientes para las necesidades básicas de toda la población.
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