
El premio corresponde a una de las cinco recompensas entregadas por número de cartón. El sorteo se realizó el domingo 11 de mayo y el pozo mayor quedó vacante.
Un niño de 4 años fue dado de alta después de sufrir quemaduras en un accidente doméstico, cuando se le volcó una olla de agua hirviendo mientras jugaba con su hermanito. Afortunadamente, se encuentra estable y continuará su recuperación en casa.
En la mañana del miércoles, un niño de 4 años sufrió un accidente doméstico que le provocó quemaduras significativas. El incidente ocurrió mientras jugaba con su hermanito de 2 años en su hogar, cuando una olla de agua hirviendo se volcó sobre él.
Tras el accidente, el menor fue llevado de inmediato al hospital Rawson y, debido a la gravedad inicial de sus lesiones, fue trasladado al área de Quemados del hospital Marcial Quiroga. En un principio, se informó que las quemaduras afectaban al 40% de su cuerpo, lo que generó una gran preocupación entre sus familiares y los profesionales de salud.
Sin embargo, fuentes judiciales indicaron que, tras una evaluación más detallada, la médica a cargo determinó que las quemaduras afectaban solo al 20% del cuerpo del niño. Además, confirmaron que no había daños en sus vías respiratorias y que su estado era estable.
Gracias al pronóstico positivo, el niño recibió el alta médica y se encuentra ya en su hogar, donde continuará su recuperación de manera ambulatoria. Los médicos han prescrito unos cinco días de rehabilitación, y se espera que, bajo el cuidado adecuado, el pequeño se recupere completamente de sus lesiones.
Este incidente subraya la importancia de la supervisión constante y las medidas de seguridad en el hogar, especialmente cuando hay niños pequeños presentes. La familia del menor agradeció el apoyo recibido y el esfuerzo de los profesionales de la salud que atendieron al niño durante este difícil episodio.
El premio corresponde a una de las cinco recompensas entregadas por número de cartón. El sorteo se realizó el domingo 11 de mayo y el pozo mayor quedó vacante.
La pareja y familiares de la joven, afirman que no recibió la atención médica adecuada y denuncian mala praxis.
La autopsia confirmó que Lucas Guerra, de 40 años, falleció por causas naturales. La Justicia descartó la existencia de lesiones o signos de violencia en el domicilio.
Ambos fueron sorprendidos dentro de un vehículo en actitud sospechosa. Portaban una pistola calibre 9 mm e intentaron escapar, pero fueron capturados tras una breve persecución.
El menor fue encontrado sano, aunque en situación de vulnerabilidad. Su entorno familiar está siendo evaluado por la Justicia.